El éxito (que escuece) y que nadie puede quitarle a Benítez en el Real Madrid

El técnico merengue está empezando a conseguir uno de los objetivos que se marcó (y le marcaron) a principio de temporada

Rafa Benítez puede sacar pecho de una cosa desde que es entrenador del Real Madrid: Está consiguiendo hacer que Gareth Bale rinda mejor cada día que pasa. Pese a que el galés ha estado bastantes partidos fuera del equipo por lesión, y que sus prestaciones siguen sin ser las de ese crack que el club pretende que sustituya a Cristiano Ronaldo a largo plazo, lo cierto es que estamos volviendo a ver a un Bale que no jugaba tan bien desde sus primeros detalles en la Liga española en la temporada 2013-2014. El encuentro frente a la Real Sociedad en el Bernabéu volvió a dejar una buena actuación del extremo, que pese a no firmar ningún gol dio la asistencia del 3-1 a Lucas en la segunda mitad.

 

Con ese pase de gol, son ya siete las asistencias de Bale en la presente Liga. Nadie supera al 'Expreso' de Cardiff, ya que Neymar también lleva siete pases de gol, pero en más partidos. Bale asiste más que hombres como Iniesta, Messi, James o Isco, y la mayoría de hombres clave dando pases de todo el campeonato. Además, acumula ocho goles en la Liga, una cifra nada desdeñable ya que le coloca en una media de cara al final de la temporada que mejoraría sus registros de blanco hasta ahora.

 

Bale, que por momentos juega pegado a la banda derecha o se descuelga por el centro o incluso por la izquierda intercambiándose posiciones con Cristiano y Benzema, está volviendo a conseguir ser vertical y regateador, cualidades que el pasado año perdió casi por completo. El inicio de temporada fue bueno para él y demostró estar adaptándose a esos nuevos movimientos que Rafa Benítez le pedía. Mejorar a Bale fue uno de los mandamientos de las altas esferas del Real Madrid al técnico en verano, y el entrenador reaccionó haciendo caso de las propias peticiones del jugador, que quería ir abandonando la banda derecha para jugar más centrado. Ahora, realmente, lo que tiene es más libertad de movimientos. Y tras su lesión, poco a poco va cogiendo ritmo. Frente al Rayo fue protagonista con goles y ante la Real fue el mejor del Madrid.

 

Es, sin duda, uno de los pocos éxitos de Benítez en el banquillo merengue. Pese a que a muchos no les guste, pues es constante la presión para que hombres como Isco y James sean titulares en detrimento, entre otros, de Bale.