Las altas que se producirán en el Barça en la temporada 2016-17

Bartomeu propone gasto cero en invierno y la llegada del "galáctico" Marco Reus en verano, algo que no convence ni a Luis Enrique ni al tridente.

Un lateral, un central y un delantero son las posiciones que Luis Enrique exige cubrir de manera prioritaria de cara a la próxima temporada. Bartomeu ha conseguido eliminar una de las prioridades de Luis Enrique, la de un centrocampista. La explosión de Sergi Roberto esta temporada ha convencido al técnico, que considera que con el canterano, Busquets, Rakitic, Iniesta - si sigue-, Rafinha y Arda Turan y Aleix Vidal, que pueden moverse en esa parcela del terreno de juego, el Barça tiene bien cubierta la zona ancha del campo.

 

Luis Enrique considera prioritaria la llegada de un jugador alternativo para Dani Alves en la banda derecha de la defensa. Tenía previsto colocar ahí a Sergi Roberto, pero ha decidido que su talento debe servir para conducir balones a los delanteros desde posiciones de centro del campo. Un jugador que gusta mucho a Luis Enrique para el lateral derecho es el colombiano Cuadrado, actualmente cedido en la Juventus y propiedad del Chelsea. Para el puesto de central Robert tiene en su agenda a una terna de tres futbolistas jóvenes, menores de 20 años, que están ofreciendo un excelente rendimiento en las ligas francesa, belga y alemana.

 

Y para la posición de delantero, Luis Enrique insiste en Nolito como prioridad y de forma inmediata. Pero el club no está en condiciones de hacer ahora un desembolso de 18 millones para pagar su cláusula de rescisión. Bartomeu prefiere la opción de Lavezzi en junio, que llegaría a coste cero. La otra alternativa para la próxima temporada es el alemán Marco Reus, un futbolista de "nivel galáctico" por quien ya se ha interesado el Real Madrid. A Bartomeu le haría especial ilusión quitárselo a Florentino Pérez y convertirle este verano en la cuarta pata del triplete con la esperanza de que para entonces se hayan podido solucionar las penurias económicas que vive el club en este momento. Reus no llegaría por menos de 60 millones de euros. Luis Enrique tiene dudas sobre este fichaje. Por su fragilidad y tendencia a lesionarse y porque le consta que ni a Messi, ni a Neymar, ni a Suárez les haría gracia su contratación.