Los comentarios tras el Shakhtar dejan en una posición complicada a Bale

El galés completó un partido bastante bueno, dejando dos asistencias para Cristiano Ronaldo

Gareth Bale mejoró notablemente sus últimas actuaciones con el Real Madrid en Ucrania. El extremo galés fue partícipe de dos de los cuatro goles marcados por el equipo blanco ante el Shakhtar, dejando dos asistencias para Cristiano Ronaldo en sendas jugadas en las que atacó el espacio superando a defensores y al portero por velocidad y potencia... y llegando al área desde la izquierda.

 

Esa es la conclusión más clara a la que se ha llegado en la inmensa mayoría de análisis realizados sobre el partido, quitando los nefastos últimos diez minutos que a punto estuvieron de hacer que el Shakhtar empatase el choque. Sin hacer un encuentro brutal, Bale dejó su sello con relativa facilidad en actuaciones en las que jugó en su sitio natural, aquel donde empezó a despuntar en el fútbol europeo con el Tottenham, el extremo zurdo. Sitio que él mismo se empeña en abandonar para su perjuicio.

 

Porque Bale se sigue resistiendo a jugar por la izquierda aun en el año en el que más fácil lo tiene para hacerlo sin problemas, porque Cristiano Ronaldo ha readaptado su posición, moviéndose a la de delantero por el centro. Sin el portugués ocupando la banda, Bale tendría disponible su sitio natural, donde puede explotar sus casi 'únicas' virtudes: El regate en velocidad, la capacidad para meter centros, el disparo a puerta... No es un jugador técnicamente agraciado ni tiene capacidad para tocar la pelota o mantener la posesión. Su rol es de jugador vertical, que no piensa, potente y físico.

 

En el año de su llegada al Madrid se cuestionó la necesidad de su fichaje (excesivamente caro para muchos) debido a que Cristiano Ronaldo ocupaba su lugar natural por la izquierda y era zurdo cerrado. Además, cortó, en principio, el concurso de Di María, un hombre muy productivo que luego resultó ser clave incrustándose en el medio campo. Por la banda derecha, el único lugar que había para Bale, hizo una primera campaña aceptable pero se hundió en la segunda. Presionó al club para ser cambiado de posición y jugar por el centro, lo que a él le gusta y donde sólo rinde con Gales. Cada vez que ha aparecido por la izquierda ha firmado sus mejores minutos, incluyendo el gol al Barcelona en la final de Copa 2014.

 

Estas evidencias podrían hacer que ya no haya 'escapatoria' para Bale si quiere mantener su buen nivel en el Madrid. Benítez podría reubicarle en el costado zurdo de forma permanente y dejando a Cristiano como 'receptor' de sus pases, tal y como sucedió en Ucrania.