Descontrol en el vestuario: Benítez no tiene manos para cazar tantos topos

Las filtraciones se han multiplicado hasta límites insospechados

Es un hecho. A Rafa Benítez el vestuario del Real Madrid le está viniendo grande. A pesar de que el actual técnico madridista cuenta con sobrada experiencia, acumulada en equipos de la talla del Valencia, el Liverpool, el Chelsea o el Inter de Milán, por citar algunos, el club blanco es muy diferente a todos ellos. En los tiempos de José Mourinho, la gran obsesión era evitar cualquier tipo de filtración desde el seno del equipo, desde el ambiente que se considera más sagrado e inviolable. De ahí que el portugués se obsesionara con cazar al que creía era el único topo existente.

 

Ahora, las cosas han cambiado. A Benítez prácticamente le faltan manos para cazar tantos topos. Las filtraciones se han multiplicado. Casi cada día aparece en los medios de comunicación que tal o cual jugador no tiene sintonía con él, que no se siente a gusto, que se plantea poner un ultimátum sobre la mesa (del tipo o él o yo), etc. Una situación que está haciendo mella en el equipo y que puede llegar a afectar a su rendimiento sobre el terreno de juego. La cúpula de la entidad, mientras, se empieza a plantear muy seriamente tomar medidas. Incluso si eso conlleva la destitución del técnico.