Curioso: Así reaccionó el vestuario del Madrid tras ver entrenar a Messi

Los comentarios de la plantilla blanca después de que el argentino se haya incorporado al trabajo con los azulgrana a sólo seis días del Clásico

'¿Había alguna duda?', fue la sensación más repetida entre los jugadores del Madrid tras confirmar el Barcelona que Leo Messi ya trabaja con el grupo. Desde que el argentino se lesionase hace ya muchas semanas ante Las Palmas en el Camp Nou, aquella corriente de noticias que aseguraba que el '10' culé no iba a llegar con casi toda seguridad al Clásico del 21N no fue tomada en serio por la plantilla. Los jugadores no son tontos. Llevan toda la vida en esto del fútbol y sabían que, viniendo de los propios medios locales de Barcelona, sólo se trataba de una estrategia para intentar despistar.

 

El Real Madrid, que por aquel entonces vivía mucho más tranquilo que ahora, se tomó el asunto con filosofía. 'A pensar en nosotros mismos', se dijeron. Que Messi estuviese parado era una evidente ventaja, así como que hubiera (que todavía hay) posibilidades de que no jugase contra el equipo blanco. Pero todo lo que pasara llegaría a modo de añadido y nunca como ventaja fundada. La consigna fue seguir trabajando como siempre.

 

Por eso los jugadores y el cuerpo técnico esperaban una última semana como esta. Siempre estuvieron casi convencidos de que Messi llegaría al Clásico y se han mentalizado para ello. El argentino, curiosamente, no es además su principal preocupación, aunque lógicamente supone un peligro añadido al Barça en conjunto. A día de hoy en el Real Madrid están más preocupados con el estado de su propio equipo, lastrado por las lesiones y por un once sobre el que todavía planean muchas dudas, dependiendo de cómo lleguen los tocados y qué quiera hacer Benítez con Benzema, Bale, James Rodríguez, Carvajal y Danilo, Marcelo, Sergio Ramos, Keylor Navas...

 

Precisamente, si hay algo que el concurso de Messi sí podría condicionar en el Madrid y terminar de despejar dudas es que el técnico blanco podría apostar definitivamente por la participación de Casemiro para tratar de frenar las acometidas de la tripleta de atacantes culés, con Neymar y Suárez en racha. Eso dejaría sólo dos puestos a cubrir -previsiblemente por Modric y Kroos- y con la duda de Benzema, colocaría a James, Isco y el propio delantero francés en la pugna por un puesto junto a Bale y Cristiano Ronaldo.