EsRadio: Halloween prueba que Luis Enrique no pinta nada en el vestuario

El periodista Juanma Rodríguez, en su blog: "Con su actitud, Luis Enrique se ha ciscado en el seny"

Aprovechando las palabras del director de nuestro medio, Rogelio Rengel, el periodista y conductor del programa radiofónico 'El Primer Palo' de EsRadio, Juan Manuel Rodríguez, ha puesto énfasis en el grave ejemplo de falta de liderazgo y control que Luis Enrique ha exhibido con su reacción ante los medios tras la polémica fiesta de Halloween de los jugadores del Barça en los vestuarios del Coliseum Alfonso Pérez de Getafe, que todavía sigue dando que hablar.

 

"Rogelio Rengel dio en el clavo cuando, al referirse a la mascarada de Piqué, Alba, Bartra y Suárez, señaló a Luis Enrique como el gran culpable del circo que organizaron cuatro futbolistas profesionales de la primera plantilla culé irrumpiendo en mitad de la rueda de prensa de otro compañero de profesión, el jugador del Getafe Víctor Rodríguez, a quien por cierto acababan de ganar", reza el citado periodista en su blog personal, al tiempo que recuerda que desde hace muchos meses el personaje que manda en el vestuario azulgrana no es otro que Leo Messi.

 

Con una actitud que en vez de censurar a sus chicos casi les ríe las gracias, el técnico culé ha vuelto a demostrar "que es un cero a la izquierda", algo que pasó a ser tras un inicio en el banquillo azulgrana en el que se atrevió a posicionarse como el líder del vestuario incluso por encima del argentino. El citado periodista recuerda que hace pocos días, preguntado por este tipo de cuestiones y por la ascensión del brasileño Neymar en ausencia de Messi, Luis Enrique siguió insistiendo en que el albiceleste es el que manda.

 

"Si a alguien hay que señalar con el dedo tras el asalto del sábado es al entrenador. Es Luis Enrique, que no se enteró de nada, quien queda retratado. Luis Enrique no sabía que sus futbolistas viajaban desde Barcelona con máscaras de Halloween en el autobús, no sabía que, acompañándoles, iría el fotógrafo y el jefe de prensa del club, no sabía que cuatro de sus jugadores terminarían invadiendo la rueda de prensa de un profesional del Getafe, no sabía que luego intentarían saltar una valla, ni sabía que, a punto de ser agarrado por un vigilante de seguridad".

 

Lo cierto es que el episodio ha tenido mucho recorrido en los medios y supone un palo gordo para la seriedad de un vestuario al que ahora le costará mucho más caro cada resultado negativo que coseche.