Bartomeu echa del Barça a los barcelonistas no independentistas

Crece el rechazo entre barcelonistas de Cataluña y de España hacia la posición de Bartomeu en favor de la exhibición de banderas esteladas.

Se ha puesto en marcha en Barcelona una agrupación de socios del FC Barcelona contrarios al uso partidista que el club está haciendo de las banderas esteladas. "Blaugrana al vent", una estrofa del himno del club, es el nombre elegido y se agarran a que el propio himno habla de los colores azulgrana como bandera y no de la estelada independentista. Son muchos los socios y aficionados del FC Barcelona que se sienten molestos por la presencia de esteladas en el Camp Nou y censuran al presidente Bartomeu que incluso apoye su presencia masiva en la grada.

 

El Barça ha entrado en una peligrosa dinámica desintegradora que le está haciendo perder muchas simpatías, especialmente en el resto de España, por los miles de aficionados que se sienten identificados con la bandera del Barça, pero no con la independentista. Hasta hace unos pocos años los niños de España eran del Barça atraídos por la magia de su fútbol y su extraordinaria cosecha de títulos. Sin embargo, la influencia de la política y el independentismo en el club complica mucho las cosas a los barcelonistas repartidos por la geografía española para ejercer como tales. Son del Barça, pero no son catalanes ni independentistas, y parece que si no comulgan con las tesis independentistas no pueden ser barcelonistas.

 

Y entre esos millones de barcelonistas de toda España ha causado estupor la estrategia que piensa utilizar el próximo miércoles Josep Maria Bartomeu para responder a la UEFA por las multas de las esteladas. Bartomeu tiene previsto desplegar durante el partido de Champions League que enfrentará al Barça con el Bate Borisov dos pancartas gigantes que ocuparán las tres graderías, del Gol Norte y el Gol Sur. En una se reclamará respeto para el club y en la otra se pedirá libertad de expresión. Pero hay más, el club permitirá el reparto de 20.000 banderas independentistas entre los aficionados que acudan al partido. Es una declaración de intenciones, que alinea al club en la órbita independentista, que alegrará a los simpatizantes de la causa soberanista, pero que causa una profunda decepción entre quienes, siendo tan barcelonistas como el que más, no se sienten indentificados con este símbolo. En España y también en Cataluña.