El vestuario del Madrid apunta al culpable: los dedos señalan a un jugador

La situación de Iker Casillas en el Real sigue siendo tensa. Las voces más críticas con el portero han vuelto a cargar las pistolas

El resumen, bajo palos, del Barça-Madrid se escribe con una premisa: "Casillas ya no gana partidos". La frase es de Alfredo Relaño, AS. Y la suscribe en el Madrid del primero al último. 

 

La situación de Iker Casillas en el Real sigue siendo tensa. Las voces más críticas con el portero han vuelto a cargar las pistolas: le acusan de haber podido hecho más en los goles, especialmente en el segundo tanto de Luis Suárez. Unos críticos que apuntan a un Casillas con la mente lejos de Madrid y el Madrid desde principio de año -"Hubo un antes y un después para Iker en el partido del Calderón", señalaban hace semanas desde el club-.

 

Voces adversas que suenan con mayor fuerza también en el vestuario, donde la 'marca' Iker cae en picado: varios jugadore del Real pidieron a Ancelotti un respiro para Iker porque "no lo vemos centrado. Mister, no está como darle un balón atrás". Casillas prefirió salir del once ante el Levante -decisión consensuada con Carlo- para evitar las iras de la grada. Ahora, tras volver a ser señalado en la derrota del Camp Nou hasta por su preparador en el equipo -Villiam Vecchi- , el retorno de Iker al Bernabéu se intuye, una vez más, complejo. 

 

Casillas no está, o no como debería. El portero, como afirman, ya no gana partidos. Las comparaciones son odiosas pero sin un buen portero es imposible ganar un gran encuentro. En el otro extremo está Bravo, con sus dos goles salvados a Benzema. El francés hizo el mejor partido en meses pero topó con el acierto del Zamora de la Liga que está mentalmente enchufado, al 100%.


"Claudio Bravo ha sido el de los milagros y Casillas antes paraba lo fácil, lo difícil y lo imposible, pero ahora ya no gana partidos. Le podemos apuntar un par de paradas con el 2-1 pero en el segundo gol se vence y ese gol ha pesado mucho. Y luego Claudio Bravo ha quitado goles al Real Madrid", apunta el periodista de As, que no está solo en la crítica.

 

"Es importante que Casillas dé confianza al Real Madrid. Es verdad que ha parado bien las últimas, que le han tirado al muñeco, pero en los goles podía haber hecho más", dijo el director de El Chiringuito, Josep Pedrerol, mientras que Paco Buyo aseguró que "Casillas pudo hacer más en el segundo gol". "Si se queda en el área pequeña habría sido un balón fácil porque sale muy precipitado y ya no puede hacer nada. Si se queda más atrás hasta podría haberlo parado con el pie".

 

Sea como fuere, lo que parece evidente es que la etapa de Iker en el Madrid toca a su fin. El divorcio con la afición es total y en la mente del jugador y su pareja, Sara Carbonero, existe el convencimiento de que un cambio de aires es la mejor opción. Un pensamiento que no es nuevo.

 

Negociaciones para salir

El pasado año, tras una irregular campaña, el Real Madrid le ofreció a Iker abonarle la totalidad del contrato hasta junio 2017, unos 30 millones de euros, para que abandonase la disciplina del club. Estaba en perspectiva el fichaje de Keylor Navas y la apuesta por Diego López era total. Pero Casillas, tras coquetear con la propuesta viró el rumbo en el último momento. Diego López tuvo que hacer el petate. Ahora, desde el Madrid, se ha comunicado al representante del futbolista que la oferta del sigue en pie: el jugador percibirá el 100% del contrato pendiente si acepta desaparecer el 30 de junio. Algo más de 20 millones de euros limpios de polvo y paja. Además, el club le garantiza una salida por la puerta grande. Sin reproches/rencores. Y silenciando/disfrazando un acuerdo que podría acabar tildando al mito blanco de pesetero a ojos de la opinión. PSG, es la opción que más gusta a la pareja. EEUU, MLS, puede esperar.