Bale debe huír del 'doctor estiramientos'. Que se lo digan a Woodgate...

Extraña y sorprendente la noticia que filtra a Jesús Olmo como el causante, en parte, de las dolencias del galés

Mucho se ha hablado sobre Gareth Bale durante estos días, después de que se anunciase que se quedaba otra vez fuera del equipo de cara a ese partido que el Real Madrid empató esta semana en Francia, en París, ante el PSG. El extremo galés ha sido objeto de duras críticas por parte de la prensa y numerosos aficionados merengues, que empiezan a estar cansados de sus continuas ausencias por lesión cuando después lo juega prácticamente todo con su selección nacional, incluyendo partidos intrascendentes. Y ahora, el periodista Marco Ruiz desvela una historia que seguramente va a añadir más leña al fuego con toda esta historia.

 

Se trata del célebre y famoso 'doctor estiramientos'. Jesús Olmo es uno de los mayores enemigos de prácticamente el vestuario del Real Madrid al completo. La historia de las diferencias entre la plantilla y el jefe de los servicios médicos del club, amparado por la directiva, es bastante conocida. De hecho, en los últimos días se había venido especulando con otro 'motín' de los jugadores, que estarían tratando de impedirle su acceso al vestuario. Son muchos los que suelen esquivarle a la hora de tratarse sus problemas físicos para acudir a los fisioterapeutas y profesionales que en su día salieron de la entidad para dejar sitio a Olmo. Entre ellos, Pedro Chueca, fisio de confianza de hombres como Sergio Ramos.

 

Pues bien. Parece ser que Bale fue tratado por Jesús Olmo con carácter negativo y eso ha redundado en sus recaídas con las lesiones musculares. Todo viene de una serie de problemas que el extremo de Cardiff arrastra en su espalda y que estaban recibiendo un tratamiento con pocos resultados, que Jesús Olmo se encargó de modificar para intentar mejorar. Y ha resultado en todo lo contrario.

 

Hasta el pasado curso con el equipo técnico de Carlo Ancelotti, Bale se había esforzado en intentar mejorar sus dolencias de espalda en base a un programa de estiramientos de los músculos cercanos a la columna, siempre según el citado periodista. Olmo lo cambió todo por un plan de "relajación miofascial", que ha causado esta última lesión en el sóleo del galés.

 

Lo más curioso de toda esta historia es que Jesús Olmo trató hace años al ex jugador madridista Jonathan Woodgate, que también sufría problemas de espalda similares y lejos de ayudarle, le siguió provocando dolencias hasta que ambos rompieron relaciones. ¿Tendrá Bale las mismas lesiones crónicas que el conocido central inglés? Y, sobre todo, ¿contribuirá del mismo modo el médico a que no desaparezcan, sino que se reproduzcan?