Primero perdonó el Real Madrid; luego lo hizo el Barcelona

Los blancos tuvieron claras oportunidades en la primera mitad para adelantarse en el marcador, igual que las tuvo el Barça para llevarse una victoria más amplia

En el Camp Nou se vivió un partido vibrante, de muchas ocasiones y momentos para ambos equipos. Tanto Barcelona como Real Madrid tuvieron muchísimas ocasiones y los dos merecieron la victoria, pero finalmente fue el equipo de Luis Enrique el que se llevó los tres puntos.

 

El primer tramo de partido fue el que estuvo más igualado. Cristiano Ronaldo avisó primero con un disparo al larguero, pero el que verdaderamente golpeó fue Mathieu con un testarazo sublime. ¿Quién le iba a decir al francés que sería el que abriría la lata en el Clásico? Pero después del tanto llegó el momento que pudo cambiar el partido. Neymar tuvo el 2-0 en sus botas pero perdonó. Le dio el balón a Iker y lanzaron la contra. Cristiano Ronaldo no perdonó. Ahí estuvo la diferencia. El portugués aprovechó la genialidad de Benzema para con la puntera batir a Bravo.

 

A partir de ese gol, el Real Madrid pasó por encima del Barcelona. Un disparo de Isco, otro de Cristiano que sacó Bravo, uno más de Bale que pasó rozando el palo. Los azulgranas tuvieron suerte de llegar con empate en el marcador. Los de Ancelotti no supieron aprovechar su momento, y lo acabó pagando.

 

Parecía que el Madrid salía igual en la segunda mitad como acabó la primera, pero el Barcelona no perdonó. Otra vez eso marcó la diferencia. Luis Suárez. Le cortas y le salen goles en vez de sangre. Aprovechó un balón que parecía que no tenía peligro y la puso en el fondo de la portería. Locura en el Camp Nou, cuando peor estaba el Barça, mejor se le ponía el partido.

 

Pero luego volvió a aparecer el perdón. Esta vez el del Barça. Los azulgranas tuvieron muchas opciones de ampliar el marcador, de igualar el gol average y de llevar tranquilidad a los corazones de los culés. Pero perdonó. Suárez, Neymar, Messi... todos tuvieron sus opciones pero ninguno consiguió ver puerta y el 2-1 se prolongó hasta el pitido final.

 

Y eso le bastó al Barcelona: perdonar menos que el Real Madrid fue lo que les dio la victoria. Ambos equipos la merecieron, pero solo uno la consiguió. Ahora queda un complicado calendario para ambos, pero el Barça está cuatro puntos por encima de los blancos, que seguro no se lo perdonarán.