La (supuesta) mala relación entre Cristiano y Benítez tiene un origen fácil

En cuanto el luso empiece a recuperar sus marcas goleadoras, el asunto se olvidará

Mucho se está hablando sobre la mala relación entre Rafa Benítez y Cristiano Ronaldo. Un 'chisme' que comenzó casi desde el primer minuto en el que el entrenador se convirtió en el 'jefe' del vestuario del Real Madrid. La mala prensa que tiene Benítez y el poco entusiasmo con el que su fichaje fue recibido por parte de la prensa y de la afición han hecho que haya mucho más espacio para hablar de sus métodos rígidos y aburridos, de su juego 'amarrategui' y de sus relaciones con la plantilla que de otra cosa.

 

Sin embargo, no existen indicios (públicos, al menos) de que exista esa mala relación Cristiano-Benítez. Lo único que se destaca son algunas declaraciones del entrenador, sobre todo del principio de la pretemporada, en las que no dejaba muy claro si para él, el portugués era el mejor futbolista del mundo. En seguida se dio cuenta de lo que podía suponer el mero hecho de contestar con evasivas a estas cuestiones y rectificó. Por otro lado, CR7 es titularísimo con Rafa y nunca ha sido sustituido hasta ahora. Juega habitualmente y lo hace donde él quiere. Por tanto, no hay excesivos motivos para pensar en que esté enfadado con el entrenador, más allá de que puedan gustarle más o menos sus métodos de entrenamiento o su sistema de juego.

 

En cualquier caso, la polvareda con Cristiano Ronaldo no está latente desde hace tiempo sólo por su relación con Rafa Benítez, sino por su extraño comienzo de temporada. El portugués no anda fino, ni de cara al gol (ha marcado sólo en tres partidos de nueve disputados de forma oficial) ni en sensaciones. Algo que, cuando cambie, hará que él mismo recupere su sonrisa habitual. En estos primeros compases del curso se le ha visto algo fallón y por momentos se desconecta del juego en los partidos.

 

En el final de la etapa de Mourinho como entrenador del Real Madrid, también se insistió mucho en sus malas relaciones con el técnico luso. Los dos compatriotas, incluso, ya tuvieron algún 'roce' dialéctico en la etapa de ambos en la Premier League. CR7 era entonces la estrella del Manchester United, máximo rival del Chelsea de Mou. Luego, cuando ambos coincidieron en la capital de España, parecía que de cara al público todo eso se había olvidado. Es más, incluso se potenció la imagen de una magnífica relación entre ambos.

 

Todo se debe al fútbol, a los goles, a lo que pase sobre el césped. Si Cristiano vuelve a sus registros habituales, no habrá espacio más que para alabanzas y su mala o buena relación con Benítez se irá olvidando. No importará. El problema, más que entre los dos, es de sensaciones futbolísticas y por el momento de dudas en el equipo.