El 'apestado' Vietto le saca (al fin) las castañas del fuego a Simeone

Si el 'baile de fichajes' del Atlético de Madrid este verano no le está saliendo bien, de momento, al equipo rojiblanco viendo el rendimiento de los mismos hasta ahora, una buena parte de esas culpas se las lleva Luciano Vietto. Su gol ante el Real Madrid en el minuto 84 del derbi de este domingo tiene que suponer un poco de aire fresco no sólo para el atacante argentino, sino para toda la línea de delanteros del equipo rojiblanco de cara al futuro. Sin duda la parte de la plantilla que más cambios ha sufrido en el mercado estival y la que más está tardando en arrancar esta temporada.

Puede que el tanto fuese de empujar la pelota, pero quizá suponga un antes y un después en el camino de Vietto en el Atlético. Desplazado por el impetuoso Correa, al igual que Jackson aunque en mayor medida, por momentos parece el quinto delantero de la plantilla. De él se dijo en verano que tenía un déficit de recorrido y preparación física que Simeone se iba a encargar de pulir. Pero sus reiteradas ausencias empezaban a hacer creer que, realmente, el Cholo había dejado de creer en él. Algo que muchos niegan.

Acusado incluso de bajo nivel de motivación en los entrenamientos, quizá sorprendido por el cambio con respecto al Villarreal y el altísimo nivel de exigencia del Cholo, Vietto cuenta apenas con un bagaje de seis partidos jugados 'a ratos' en la Liga, sólo dos de ellos como titular. Ni un sólo gol, y una versión alejada de esa que deslumbró a toda Europa el pasado curso, vestido de amarillo. Incluso sonó para reforzar al Bayern de Guardiola.

Todas estas circunstancias le habían ido dejando en el banquillo, alejado de la titularidad, cada vez más. Pero contra el Madrid fue 'salvador' y revulsivo, sustituyendo a un Correa fundido. Supuestamemte fichó para ser titular junto a Griezmann y Jackson en una delantera de tres futbolistas diferenciados, de ensueño, que por ahora sólo ilustra las guías de la liga de los distintos medios de tirada nacional. Pero tiene toda la campaña por delante. Y, con 21 años, representa el futuro a largo plazo del Atlético y es uno de los referentes de ese fútbol diferente que, poco a poco, Simeone quiere ir inculcando a los suyos. De momento no lo consigue.