Cuatro madridistas pueden hacerse 'Galácticos' si triunfan ante el Atlético
Salir victoriosos del Vicente Calderón es algo que haría que el Madrid despegara
La plantilla del Real Madrid está concienciada. Vencer al Atlético de Madrid no sólo alejaría al equipo blanco de uno de sus dos rivales más directos en la lucha por el título de Liga a cinco puntos ya en octubre (y mataría bastante al Atlético en cuanto a sus aspiraciones, al menos por un tiempo), sino que supondría un estímulo y una explosión de confianza en la plantilla tremenda. Mucha más que la que se ganó doblegando al Athletic en San Mamés, que ya fue bastante.
El Madrid logró vencer en uno de los campos más difíciles de Europa, pero tres días después perdió su recién estrenado liderato empatando por sopresa con el Málaga en casa. Esa es una euforia que hay que controlar, pero aparte de los nervios el equipo demostró que es competitivo ante rivales muy peligrosos.
Ganar al Atlético supondría vencer a un equipo al que el Madrid sólo ha ganado en uno de sus últimos ocho partidos, y contra el que mentalmente sufre lo indecible. También puede ser una cita crucial para cuatro futbolistas blancos, que en algunos casos afrontarán su primer derbi y en otros, ese partido que puede catapultarles al estrellato. Keylor Navas, para empezar, defenderá la portería merengue por primera vez en un gran encuentro. Frenar las acometidas de una de las mejores delanteras del campeonato podría elevarle a los altares definitivamente.
Si juega de titular (porque tiene muchas opciones), Raphael Varane podría dar el golpe en la mesa que le confirme como titular para Rafa Benítez. Sería la primera vez desde que fichó por el Madrid en la que parte con ventaja con respecto a Pepe por un puesto en el once, algo que rozó a finales de la temporada 2012-2013 con Jose Mourinho para volver a ser suplente habitual en el primer curso con Carlo Ancelotti. Por último, el choque puede confirmar las cada vez mejores sensaciones con Kovacic, que tendrá su importancia tanto si es titular como si parte desde el banquillo y sale después, como para Bale. El galés tiene que regresar y ser determinante en la mejoría del juego de ataque blanco para confirmar que se ha adaptado a su nuevo rol con Benítez, y que está listo para comandar al Madrid desde posiciones interiores.