El jugador del Real Madrid del que siente envidia (sana) Luis Enrique

Mateo Kovacic, quien ya sonó como posible refuerzo azulgrana, representa el prototipo de jugador con papel secundario pero de calidad que tanto echa de menos en el fondo de armario del Barça

Luis Enrique tiene envidia de Mateo Kovacic. Envidia sana, se entiende. El croata, que ya estuvo en la órbita barcelonista durante el pasado verano, representa al prototipo de jugador llamado a tener un papel secundario, pero con mucha calidad, que tanto echa de menos en el fondo de armario del Barcelona.

 

El técnico azulgrana no lo dirá públicamente, pero también admite que el fondo de armario con el que cuenta para esta temporada es bastante corto. Por lo menos, hasta que llegue el próximo mes de enero. Y no es algo que haya dependido sólo de la sanción de la FIFA. La aparente falta de nuevos talentos emergentes en las categorías inferiores (la cantera no ha contado realmente con mucho protagonismo en la era post Guardiola) y la errática política seguida por los responsables técnicos a la hora de cerrar nuevos refuerzos han causado una indiscutible pérdida de calidad en la plantilla barcelonista.

 

A Luis Enrique le encantaría tener jugadores con el perfil de Kovacic. O Carvajal. O Isco. O Varane. E incluso el actual Pepe. Se trata de futbolistas que saben admitir que no tendrán tanto peso en el equipo como algunos de sus compañeros, pero que están siempre dispuestos a aportar su calidad, para nada despreciable, en cuanto se considera oportuno.