Crecen los rumores en la Real: El vestuario le hace la cama a David Moyes

Las últimas declaraciones de algunos jugadores no invitan a pensar en que reine el buen ambiente

Tres empates y cero goles a favor han bastado para que el magnífico, ilusionante y esperadísimo proyecto de David Moyes en San Sebastián corra peligro sólo cuando hemos llegado a la jornada número 4 del campeonato, todavía por disputar. Pese a que gracias a la influencia y el peso mediático del entrenador escocés el equipo donostiarra ha batido su propio récord de inversión este verano en futbolistas, ocupa puestos cercanos al descenso, que no rozaba desde el fatídico año de su caída a los infiernos de la Segunda División, la campaña 2006-2007.

 

Es pronto para sacar conclusiones de cualquier tipo, pero lo cierto es que el juego y las sensaciones que transmite el grupo sobre sí mismo y sobre su propio entrenador no son las mejores. De todo ello habla el periodista Eduardo Fernández Abascal en IBI Times Uk, analizando la semana que se le viene encima al preparador ex del Manchester United, con dos partidos en apenas cinco días en los que se jugará su posición con respecto a vestuario, prensa y afición.

 

Precisamente, sobre algunos de los gestos del vestuario versa dicho artículo, que recuerda que algunos episodios protagonizados por jugadores del plantel txuri urdin no han sido, precisamente, los más acertados a la hora de generar tranquilidad al grupo. Hace algunas semanas fue David Zurutuza el que transmitió públicamente sus dudas acerca de cómo se sentía el equipo y también cierto malestar por su propia falta de minutos: "El equipo no funciona como se esperaba. Tenemos un gran equipo, pero nos falta la alegría. Yo creo que hay que jugar con más alegría, concibo el fútbol de esa manera. Echamos de menos muchas cosas, no sólo el último pase. Necesitamos una idea, que el equipo sea más compacto. No todos vamos juntos. Si ves las caras de los jugadores después de los juegos, que son un drama porque vemos que podemos dar más, pero no están funcionando como deberíamos y debemos cambiar. No sé si es una cuestión táctica o nosotros, pero hay algo que no funciona ".

 

Y esta misma semana, la que es, probablemente, la máxima estrella del conjunto vasco, el mexicano Carlos Vela, reconoció sin tapujos que su intención este mismo verano fue abandonar la Real. Todo magnífico, en pocas palabras.

 

Estos episodios han provocado que la pregunta evidente empiece a sobrevolar el ambiente en la ciudad del norte de España: ¿Están haciéndole la cama los futbolistas a David Moyes? Desde luego, si no es así sus actos han sido torpes. La creencia es que de momento no, pero también se sabe que algunas figuras del vestuario como Canales o Granero están evidentemente molestas por su pérdida de protagonismo en lo que llevamos de temporada. Los próximos partidos marcarán el destino de la Real en las fechas venideras.