Messi calla el último escándalo en el Barça (y es de los gordos)

Leo sabe del último 'top secret'

La renovación de Jordi Alba es motivo de alegría para un Leo Messi que había tachado su continuidad como objetivo prioritario, por delante de cualquier llegada. Una firma que viene con ‘top secret’.

Porque la directiva del Barça intento de todas las maneras rebajar las pretensiones del lateral catalán, que pedía el oro y el moro para estirar su vínculo, que finalizaba en 2020, lo que había llamado la atención de los grandes clubes.

Pero, por insistencia del capitán, al final han tenido que acceder a sus demandas, lo que bañará a Jordi en oro, cobrando una cifra que, entre sueldo más variables y distintos bonus, pasará los 15 millones de euros al año. Casi nada.

El ‘18’ estampará su firma hasta 2024, lo que asegura su retirada en el Camp Nou. Una gran noticia para todos, empezando por un Messi que seguirá jugando al lado de uno de sus mejores socios y por un Valverde que tendrá a una pieza clave bajo su mando varias campañas más.

Por lo tanto, está descartada la llegada de Ferland Mendy, por el momento. Una renovación que, eso sí, retrata una realidad: Leo es el jefe del Barcelona y todo lo que dice va a misa.

La directiva, Valverde y el resto de miembros de la cúpula culé pintan poco. Aquí el que manda es Messi.

Y se acabó.