El rumor de las lesiones que va de boca en boca en el vestuario del Madrid

La plantilla apunta a dos frentes como principal mal

El Real Madrid no ha logrado desterrar a uno de los grandes dramas del equipo al mando de Carlo Ancelotti. Las lesiones musculares han puesto al club blanco sobre aviso. El pasado curso fueron hasta 15 los diagnósticos que dejaron a uno u otro futbolista en el dique seco. Con al nueva campaña, la estadística apunta maneras: con Gareth Bale son siete los jugadores que han caído por molestías no trumáticas (con ausencia de golpe). Primero fue Illarramendi, con una sobrecarga ante el Roma (18 de julio). Luego Benzema, que se lesionó dos veces en el muslo derecho (recayó de la misma dolencia). Después Cristiano, con lumbalgia. Pepe con una rotura en el gemelo. Y ahora Gareth Bale que se retiró con problemas en el gemelo ante el Shakhtar. Precisamente, en abril del curso pasado ya sufrió una rotura del sóleo, también de su pierna izquierda. Entonces estuvo de baja dos semanas. Es la séptima lesión no traumática desde julio. A esas siete hay que añadir los problemas físicos que obligaron a Sergio Ramos y Varane a ser sustituidos.

 

En este sentido, y desde el Madrid, se apuntan dos focos distintos como causa del entuerto. Primero, la dureza de una gira por Australia/Asia-más de 44.000 km. en cinco días- que no ha permitido al equipo establecer un plan metódico. Y segundo, y más preocupante, el cambio de marcha que ha imprimado Rafa Benítez a los entrenamientos blancos desde el primer día.



La intensidad en el trabajo diario de Rafa dista mucho de la suavidad con la que se desarrollaban las sesiones bajo el mando del Carletto. Algunos expertos apuntan, incluso, que el ritmo y el duro trabajo con el nuevo mister puede haber sido un cambio demasiado radical.