Sergio Ramos se alía con Isco y Marco Asensio para cargarse una estrella de Florentino Pérez

Una estrella, vetada del Real Madrid

Puerta cerrada. La eliminación del Inter de Milán de la Champions ha servido en bandeja de plata el fichaje de Mauro Icardi por el Real Madrid.

Wanda Nara, mujer y agente del argentino, ofrece la salida del ‘9’ al Real Madrid por la cláusula de rescisión.

 

El Inter se niega a negociar su venta y quien quiere al joven futbolista deberá abonar los 110 millones de euros de penalización.

Una cantidad que no frena a Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, pero sí los avisos que llegan del vestuario.

Sergio Ramos, Isco, Marco Asensio y compañía no quiere ver, ni en pintura a Icardi de blanco. ¿El motivo? La mala fama del futbolistas. Y, especialmente, la de Nara.

Los líos de jugador y agente son famosos en Milán, así como una vida de lo más movida y los conflictos de ambos con estrella y las mujeres de estas en el Inter y Argentina.

Un realidad que también conoce, y de primera mano, el máximo mandatario del Madrid.

Icardi, que ya estuvo a un paso de vestir la camiseta merengue el pasado verano, despierta más rechazo que admiración en una plantilla que, eso sí, reconoce que necesita más pólvora arriba.