Sólo la sanción FIFA salvó a Rafinha y Sergi Roberto en el Barça

Los dos jugadores tenían la cruz, aunque ahora el club presume de canteranos

Al Barça le ha tocado la lotería con dos jugadores canteranos que le han salido a coste cero: Rafinha y Sergi Roberto. Al primer lo querían traspasar este verano, antes de que venciera su contrato el próximo 30 de junio para sacar tajada económica. No había interés en su renovación por el papel secundario que jugó la temporada pasada en las alineaciones de Luis Enrique. No había voluntad de renovarle el contrato, de hecho sigue todavia sin renovar a ocho menos de quedar libre. Pero la llamada de la selección brasileña y su papel más relevante en el equipo esta temporada invitan a llegar a un acuerdo que no entraba dentro de las previsiones del club.

 

El caso de Sergi Roberto, convertido por necesidades del guión -lesiones de Alves y Douglas- en un lateral improvisado de gran rendimiento, tampoco deja de ser curioso. La idea del club era sacarle rendimiento económico en el mercado veraniego, aunque finalmente Luis Enrique optó por quedárselo al menos hasta enero, cuando el Barcelona cumplirá la sanción de la FIFA y podrá realizar fichajes. Casi sin querer, el Barcelona se ha encontrado con un lateral de mucho nivel y muchos años por delante, una alternativa real a Dani Alves, que durante sus siete años en el Barcelona nunca ha tenido competencia directa por el puesto.

 

Ahora tanto Rafinha como Sergi Roberto permiten al Barça sacar pecho, presumir de cantera y venderlos en sus medios afines como los dos grandes fichajes de este verano. Lo cierto es que hace unos meses estuvieron más fuera que dentro del Camp Nou.