El circo (hasta el último minuto) del no fichaje de Monreal por el Athletic

Por enésima vez, no jugará en el conjunto vasco

Y un verano más, Nacho Monreal no jugará en el Athletic Club de Bilbao. El lateral izquierdo seguirá jugando en el Arsenal tras otro mercado estival lleno de especulaciones, supuestas ofertas, tiras y aflojas y promesas infundadas en los medios, que han convertido al jugador de Eraso en la auténtica aspiración eterna de la entidad bilbaína en las últimas campañas.

 

Sin embargo, la historia entre Monreal y el Athletic alcanzó cotas prácticamente cómicas este verano, hasta el último minuto antes del cierre. Sin tener muy claro si Arsene Wenger renovaría o no al futbolista, se vendió que el club vasco se lanzaba a por él, algo que nunca acabó de confirmarse del todo. De manera extraña, fuentes como el diario As incluso se atrevían a anunciar la tan esperada llegada del deseado a mitad de julio: "Monreal será jugador del Athletic por 10 millones de euros y firma hasta 2018". A día de hoy, esta noticia todavía puede leerse en el citado diario.

 

Pero nada más lejos de la realidad. Varios medios anunciaron la llegada del jugador sin que ninguno de los clubes la oficializase, y pasados los días, empezaron las sospechas. El asunto cayó en un olvido relativo, aderezado por la operación Raúl García (ésta sí se ha hecho) que mitigó esa sensación de fracaso. Pero aun el pasado lunes había todavía algunos que esperaban el milagro.

 

El perfil de Monreal era modificado aposta a última hora de la noche del 31 "su equipo actual es el Athletic de Bilbao", decía. Desde Twitter, perfiles afines al club vizcaíno aseguraban que estaba fichado, pero nadie confirmaba ni desmentía nada. Y en estas, el propio jugador comenzó a seguir al Athletic a través de la mencionada red social. ¿Guiño? ¿Broma? ¿Cachondeo? Desde luego una historia digna de disparate.

 

La realidad es que Monreal no ha llegado a ser jugador del Athletic. Un verano más. Y seguramente, en posteriores mercados de fichajes se siga a vueltas con el tema. La duda es si todavía uno se podrá creer algo.