¿Hasta cuándo seguirán creyéndose el discurso austero de Simeone?

Los jugadores siguen a rajatabla las directrices del técnico dentro del campo y fuera en las declaraciones en las que frenan lanzar las campanas al vuelo

El técnico Diego Simeone tiene muy claro su discurso ante la prensa. Caló lo de “partido a partido” y el argumento al arranque de la temporada es “no me gusta mentir a la gente y una cosa está clara: no podemos competir con el Madrid y el Barcelona. Nuestros rivales son el Sevilla, Valencia y Athletic; el objetivo es el tercer puesto. Somos un nuevo equipo”.

 

Le suena, ¿no? Pues estas palabras las pronunció hace justamente un año, al inicio de la anterior campaña. Y son las mismas cambiando a un rival que manifiesta actualmente el entrenador y sus jugadores.

 

Koke advirtió que el Sevilla "es un rival directo" en el duelo de Liga que le espera al Atlético este domingo en el Sánchez Pizjuán, ya que "el Real Madrid y el Barcelona están por encima del resto", y el objetivo de los colchoneros es acabar "terceros como mínimo".

 

"Nuestra Liga es el Sevilla, el Valencia y el Villarreal y tenemos que quedar como mínimo terceros. Ese es nuestro objetivo, todos queremos salir campeones de todo, pero primero intentar ser terceros y lo que venga, bienvenido será", expresó el centrocampista.

 

Simeone marca las directrices y sus jugadores las siguen a rajatabla, pero en función de los resultados que se vayan cosechando, la austeridad puede dejar de tener peso en el vestuario y que empiecen a producirse una mayor euforia, después de ser un equipo que ha ganado una Liga y ha llegado a la final de la Champions y que cada temporada, diga lo que diga el Cholo aspira a lo más alto, porque potencial tiene.