Simeone y su mensaje (también a la directiva) con su once ante Las Palmas
El Cholo empieza a notar las consecuencias de tener un largo banquillo. Tendrá que manejar muy bien los tiempos con los suplentes para tener a todos contentos
El primer duelo de la temporada en Liga contra Las Palmas no sólo dejó la primera victoria del curso 2015-2016 para el Atlético de Madrid, sino el primer gran debate en torno al once titular que el Cholo Simeone dispuso sobre el terreno de juego y las alternativas que manejó desde el banquillo. Un banco repleto de ex titulares y de figuras, algunas de las cuales, no tardarán en empezar a ponerse nerviosas si su rol en el equipo no cambia pronto.
Con Jackson Martínez y Griezmann como pareja titular en ataque y Gabi-Tiago-Óliver-Koke como cuarteto de 'pretorianos' escoltando a los dos puntas, parece que estos seis nombres serán complicados de 'tumbar' para la segunda unidad, al menos de primeras esta temporada. Raúl García apenas jugó diez minutos. Torres tuvo más tiempo en la segunda parte y la salida de Correa demostró que el Cholo tiene muchas ganas de que el joven delantero triunfe este año.
Las cruces: Savic, Saúl, Vietto, Carrasco... Sorprende sobre todo la falta de minutos del ex del Villarreal, jugador joven por el que se peleó media Europa hace unos meses y que ahora parece partir con bastante desventaja en el Atlético. El gesto con Raúl García también hará que el riojano siga dándole vueltas a la cabeza de aquí al 31 de agosto con la posibilidad de irse al Athletic; y los nuevos fichajes 'secundarios' tendrán que esperar...
Pero, también, hubo mensaje a los de arriba. Durante todo el verano, el Cholo planteó un equipo pensando en sus peticiones: Marco Reus, Cavani... esperaba algún fichaje de postín y en su lugar, en vez del alemán, le trajeron al tal Carrasco para el centro del campo. Un extremo belga a años luz del germano. La consigna es que, salvo excepciones, el palco debe ver que tendrá que tirar casi con lo mismo de años anteriores.
Como siempre, Simeone no se casa con nadie ni regala nada, pero es imposible tener a todos contentos. Habrá que ver si rota como debería o mantiene sus esquemas. Esquemas que pasaban por un sistema 4-3-3 esta temporada para que pudiera dar cabida a todos los nuevos que había en ataque. Parece que no será así y eso fomentará la competencia... y los nervios. Algo que sólo un técnico con su carácter podrá controlar. Por el momento.