El Trofeo Santiago Bernabéu ha puesto nerviosos al Real Madrid y Ramos
Habrá reunión antes de que el coliseo blanco reciba por primera vez a los jugadores esta temporada
Hace unos días se confirmó que el Real Madrid finalmente sí disputaría el Trofeo Santiago Bernabéu. Será el próximo 18 de agosto contra el Galatasaray turco. Aunque se especuló durante bastante tiempo que el rival, en el hipotético caso de haber trofeo sería el Oporto como medida para homenajear a Iker Casillas, finalmente el club portugués no encontró fechas. El homenaje tendrá que esperar.
Muchos se alegran de que no se pierda el Trofeo Santiago Bernabéu. Otra vez. Eso sí, el choque tiene cierto morbo porque será la primera vez que el Santiago Bernabéu se reencontrará con los futbolistas tras todos los acontecimientos que sucedieron en los últimos días de la pasada campaña: El cese de Carlo Ancelotti, la llegada de Benítez y la convulsa salida de Casillas, así como el 'culebrón Ramos'. Pese a que suele ser un partido con mucho turista en las gradas será interesante ver cómo reacciona la grada ante todo lo que ha pasado, que no es poco.
Florentino Pérez se las verá con los aficionados. Su imagen ha quedado deteriorada a la vista de muchos de ellos tras la forma de despedir a Casillas del club y todo lo sucedido con el central. Tampoco se terminaron de entender las explicaciones dadas para despedir a Ancelotti. Pese a todo, lo más interesante será ver cómo recibe el coliseo madridista a Sergio Ramos, que ha presionado mucho a la entidad para conseguir su renovación al alza.
Por todo ello, presidente y futbolista andaluz quieren dar un golpe en la mesa y calmar la situación antes del encuentro. Se habla de una reunión este jueves para tratar de firmar la tan ansiada renovación, cuyos parámetros estarían más o menos definidos: Contrato hasta 2020 y un sueldo que subiría hasta los 8,5-9 millones de euros por campaña más incentivos por objetivos. La intención es que nadie hable ya de ello durante el choque contra el Galatasaray y ninguno de los protagonistas se lleve una pitada. Al fin y al cabo, es la puesta de largo de Ramos como primer capitán y sería nefasto que comenzara siendo silbado por una parte de su propia afición.