El vestuario del Atlético, convencido de robarle el título a Madrid y Barça

"Nuestro objetivo es competir lo máximo que podamos". Estas palabras de Raúl García son un fiel reflejo de lo que el vestuario del Atlético de Madrid lleva intentando transmitir de puertas para fuera desde que Diego Pablo Simeone aterrizó en la nave rojiblanca, pero dentro de ese grupo hay incluso más ambición. El derrotismo propio del futbolista, el directivo y el seguidor colchonero de tiempo atrás lleva tanto desterrado que parece que aquella época en la que perder era algo cotidiano hace Siglos que pasó. El Atlético, este Atlético, que la pasada campaña siguió siendo competitivo aun sufriendo mucho más que hace dos campañas para estar al nivel de los dos grandes, vuelve a la carga con su discurso trabajador pero que al mismo tiempo reta al fútbol español: Volverán a intentar el más difícil todavía.

Y ya no es la primera vez que tratarán de conseguir ser más protagonistas que sus dos enemigos. El club ha sabido venderse dentro y fuera de España, reforzarse con fichajes propios de una entidad poderosa e identificar sus defectos para seguir mejorando. La conclusión que se saca de esta pretemporada no es sólo que el Atlético no es menos competitivo que hace dos años o que la temporada pasada, sino que incluso tiene mejor equipo que el que logró la Liga 2013-2014.

Con esta premisa, no es difícil encontrar puntos clave por los cuales los seguidores rojiblancos pueden estar seguros de que su equipo no comete los errores del pasado, es capaz de fallar menos que sus rivales e incluso colocarse a su altura cuando hace falta. El primero de estos puntos es, como ya hemos dicho, el referente a fichajes. Nombres como Jackson Martínez o Vietto esta temporada o Griezmann la pasada campaña son habituales en la rumorología de Barça o Real Madrid, pero ahora el Atlético es capaz de llevárselos. El once titular de los de Simeone esta temporada tendrá una línea de ataque que nada tendrá que envidiar a ningún equipo.

Después, encontramos el capítulo de los que se quedan. No sólo hace fichajes, este conjunto sabe retener a los futbolistas que sabe que son importantísimos. Koke, Godín, el propio Griezmann... en otros tiempos habrían 'volado' en busca de mejores contratos y más opciones de títulos. Pero no es fácil decirle "no" a alguien como a Simeone. Sobre todo si por detrás lleva el escudo del equipo madrileño.

El apartado de marketing, sin descuidar la pretemporada. El Atlético de Madrid anda estos días por China haciendo afición, vendiéndose y presentándose como alternativa a Madrid y Barcelona en el mercado asiático. Cosas que en otros tiempos no habrían sido posibles. Por otro lado, mide estas giras con meridiana precisión, sin descuidar sus 'stages' en Los Ángeles de San Rafael como siempre se ha hecho. Seguramente llegue mejor al inicio de temporada que sus dos rivales, exhaustos por sus giras de mayor duración y menos entrenamientos impuestas por el negocio.

Mismo trabajo, misma humildad, mayor preparación y un equipo renovado y con más estrellas... estas son las armas de un Atlético de Madrid que vuelve a verse capaz de dejar en evidencia a Madrid y Barcelona.