El vestuario del Oporto destapa el cambalache entre Casillas y Lopetegui
El grueso de la plantilla del conjunto portugués está muy quemada con el ex portero del Madrid
El vestuario del Oporto ya no puede con Iker Casillas. El ex portero del Real Madrid tiene a sus nuevos compañeros de equipo más que hartos. No entienden los aires de divo que se gasta, como si fuera una nueva puesta en marcha de las críticas que lanzó su propia madre contra el club. Para Casillas, el conjunto portugués es poco más que un equipo de barrio. Una mancha en su expediente. Además, el resto de jugadores tampoco está de acuerdo con todos los privilegios que acumula el arquero.
Para empezar, no entienden cómo es posible que un jugador que está ya en la recta final de su carrera se haya convertido no sólo en el mejor pagado de todo el Oporto, sino también de toda la liga portuguesa. Consideran que es demasiado en comparación con lo que realmente puede aportar al equipo. Y además, el club prácticamente se ha puesto a sus pies. Incluso han movido los hilos para buscarle trabajo a su pareja, Sara Carbonero.
Tampoco les entra en la cabeza la sobreprotección que le está ofreciendo Julen Lopetegui, el gran artífice de su llegada al Oporto. Algunos creen que le ha facilitado a Casillas una especie de retiro dorado, que prácticamente lo ha enchufado en el equipo. El hecho de que tenga previsto ir a vivir a la misma urbanización en la que ha fijado su residencia el propio técnico no ha hecho sino que aumentar aún más las suspicacias.
Todo esto le puede acabar pasando factura al portero. "Que corra el crack, que para eso cobra", cuentan que piensan a veces los jugadores agraviados por diferencias salariales tan grandes como poco comprensibles. Un pensamiento que en este caso al igual será "que se las arregle él solito con los delanteros, que para eso cobra".