Es japonés como Toyota, pero no habías visto nada igual en España
El Honda N-One está a punto de desembarcar en Europa


En Japón, desde los años cincuenta, existe una categoría muy particular de vehículos que, si a algo se parecen, es a los Biscuter o los Isetta que circularon por Europa en aquella misma época de carestía de posguerra. En el Viejo Continente evolucionaron rápidamente hacia los utilitarios y, de aquellos llamados entonces microcoches o cuadriciclos, pocos se acuerdan. Ahora, marcas como Citroën los han resucita con vehículos como el AMI, que se conduce sin carnet, pero en Japón la evolución fue otra.
Allí, en el país del Sol Naciente, aparecieron lo que se vino en llamar kei car, unos vehículos de pequeño tamaño con motor u potencia limitadas, con matrícula especial y que, por eso, pagan menos impuestos. En sí, son automóviles, pero no del todo. Y, ahora, Honda quiere traer uno de ellos a Europa para complicar la vida a vehículos como el Dacia Spring.
Honda N-One
El vehículo elegido es el Honda N-One, un coche de líneas cuadradas y faros redondos muy característicos que hasta la fecha se fabricaba sólo con motor de combustión y que va a disponer ahora de versión eléctrica. Por eso, los nipones lo presentaron en el festival de Goodwood de este año. Y fue la sensación.
De momento, no hay muchos datos sobre cómo será, pero sí que se puede adelantar que medirá 3,4 metros de largo –los kei car no puede pasar de ese umbral, ya que entonces no disfrutan de las ventajas que implica pertenecer a esa categoría.
Autonomía y plazas
El coche se lanzará en Japón este otoño y la fecha de llegada a los concesionarios europeos de Honda tampoco se ha desvelado. Su autonomía alcanzará los 270 kilómetros y el maletero, por supuesto, será mínimo. Dentro, sólo van a caber cuatros personas; pero, para hacerlo más del gusto europeo, Honda ha ensanchado los ejes.
En sí, y si finalmente llega a las concesiones de Honda en Europa, podría llegar a convertirse en una seria alternativa no sólo al Dacia Spring, sino también al más pequeño de los BYD, el Dolphin Surf. Todo, como siempre, dependerá del precio final con el que Honda decida comercializarlo.