Marc Márquez y Joan Mir esconden la baza contra Bagnaia, Bastianini y Quartararo en Portimão

La presentación del equipo Repsol Honda deja un mensaje: la lucha por el título es complicada, pero posible

Ilusión, máxima expectación y expectativas, ganas y posibilidades, de todo eso y algo más se habló durante la presentación del equipo Repsol Honda en el Mundial de Moto GP de 2023, con Marc Márquez y Joan Mir subidos al mismo discurso, ese que les enmarca en una situación compleja para dos campeones del mundo: su incógnita, su paso atrás, debe revertirse en tiempo récord.

Dejaban sin embargo translucir ambos que pese a los malos resultados y sensaciones de Sepang, en Malasia, un circuito complicado por características y trazado para ellos, que si bien es cierto que están por detrás por ahora, pero que la esperanza de rodar en cabeza existe. Lo que no desvelaron es el cómo pretenden hacerlo en tiempo récord, ya que la cita de Portimão, con el último Test antes del arranque, que también será en suelo portugués, está a la vuelta de la esquina.

Márquez, como no puede ser menos, acepta el reto de tratar de encontrar la manera de luchar por el título, que es su objetivo. “La presión es una cosa con la que hay que convivir, y más si tienes mentalidad de ganador. La presión te hace estar más concentrado y te da un punto más, y la he echado de menos. Me autopresionaba para intentar conseguir mejores resultados. Lo dice la historia de este equipo, tenemos que hablar de títulos”, decía.

Por su parte Joan Mir fue preguntado por el recuerdo de otros campeones estrellándose con esos colores, como Lorenzo, a lo que el campeón en 2020 dijo que “ese vértigo al fracaso siempre está, no solo en este equipo. Pero confío en mis capacidades y en el equipo, y creo que tendremos una moto competitiva. Una vez estemos arriba, ya tocará gestionarlo. Confío en lo que puedo hacer”.

En el Campus Repsol en Madrid, Marc Márquez y Joan Mir presentaron su proyecto, que parece herido de inicio pero en el que, al menos de puertas afuera, sí creen ambos, nos falta saber al resto cómo harán para luchar por el título que ambicionan también Bagnaia, Bastianini o Quartararo.