Marc Márquez revive la pesadilla de Valentino Rossi: Enemigo en casa

Posiblemente a estas alturas Marc Márquez conozca a la perfección el rostro de sus enemigos en el futuro inmediato. Uno es el mismo, la lucha contra su lesión, su recuperación y la puesta a punto de una moto que avanza pero de forma muy lenta, tanto que desespera al campeón. La otra es que la competición no le espera, ya que hay muchos aspirantes y nadie da su brazo a torcer en un Campeonato del Mundo en el que en su ausencia han cambiado muchas cosas. Y encima ahora Marc hace frente a un tercer obstáculo, uno que vivió en sus carnes Valentino Rossi.

Os contábamos en Don Balón Motor hace pocas fechas como Il Dottore se había sincerado ante los medios de comunicación con respecto a ciertos momentos de su carrera deportiva, especialmente los relacionados con Yamaha, poniendo el dedo en la llaga de un asunto que no le hizo ninguna gracia en su momento y que con Márquez, hasta cierto punto y en su justa medida, puede tener un símil. Sí, estamos hablando del fichaje de Jorge Lorenzo por la firma nipona cuando el italiano era el capo del equipo.

Pues bien, ahora y tras las buenas sensaciones de Pol Espargaró en Silverstone, Márquez puede tener ‘su Lorenzo’ en casa. Marc ha tenido que cambiar su estilo de pilotaje, algo en lo que todavía esta trabajando, además está tratando de adaptarse a la máquina, que también le genera incomodidad, de ahí el número de caídas, pero Espargaró puede ser un foco de tensión a mayores, ya que está obteniendo poco a poco buenos resultados y le supera en la clasificación del Mundial por tres puntos.

El jefe de equipo en Repsol Honda, Alberto Puig, dijo sobre el compañero de Márquez en el GP de Gran Bretaña que “este fin de semana ha sido un punto de inflexión muy importante para Pol Espargaró. Puede estar en las primeras posiciones por lo que esperamos que a partir de ahora pueda seguir así y seguir progresando”. La moto, las molestias físicas, las caídas y la adaptación mantienen a Márquez en un estado de perpetua presión, a la que ahora se añade la de un compañero que comienza a sacar la cabeza. ¿Cómo será la tendencia en el GP de Aragón?