Marc Márquez calienta el GP de Italia (y el drama de Jorge Lorenzo va a más: nuevo portazo )

Mugello calienta motores

Marc Márquez no agacha la frente. El piloto de Honda llega al GP de Italia, a la casa de Valentino Rossi, avisado del infierno que habrá en Mugello, dónde los seguidores de ‘Vale’ lo esperan con uñas y dientes.

¿Preocupación? Esto es lo que cuenta Marc: "¿El ambiente de Mugello? Tapones, casco, la pista y ya está. Es uno de los circuitos más complicados del Mundial con puntos con mucha adrenalina, así que es bueno llegar con ventaja", afirma Marc, líder con 36 puntos de ventaja. Todo está aún muy apretado en esta fase del campeonato, y hay que mantener los pies en el suelo. Aquí hicimos buenos test pero hay muchas dudas de neumáticos, reglajes, temperaturas y todo eso", argumenta.

En el lado opuesto, se encuentra Jorge Lorenzo que lleva semanas pidiendo caridad a una gran marca para que lo acoja en su seno después de confirmarse que no seguirá en Ducati.

Entre las opciones, una: una moto satélite en Yamaha. Lin Jarvis, capo de la firma nipona, dice esto: “Es difícil entender lo que sucederá con el futuro de Lorenzo, no está en una situación fácil. Todavía no está fuera de Ducati, al menos oficialmente, aunque muchos dicen que el divorcio será cierto. Veremos si Jorge continua o no, pero también puede ser que se rinda”, explica.

 “Si me haces esta pregunta hace cuatro semanas, te habría dicho que iba a terminar en Suzuki, pero ahora parece una hipótesis improbable. Repito, es una situación muy difícil, también porque él está acostumbrado a ser un piloto de fábrica”.

En otras palabras o lo que se dice fuera de cámara: Yamaha no perdona su fuga a Ducati y no lo quiere ni ver.