Marc Márquez acorrala a Quartararo y Bagnaia: Austin viene con truco

El piloto de Repsol Honda posee el as de la baraja

Cuando uno gana en un trazado y lo hace con suficiencia, digamos que se apunta una muesca en su mono, certificando que ese territorio conquistando posee características afines con el protagonista en cuestión, y si esto es cierto y una victoria apega al piloto con el asfalto que le hace salir victorioso, entonces Marc Márquez tiene hasta seis razones para tener muy preocupados en el Gran Premio de Las Américas a los dos intratables líderes del Campeonato del Mundo de Motociclismo en su categoría reina.

Es cierto que Márquez no ha podido disfrutar de sus sonadas victorias habituales en Austin durante los dos últimos años, ya que en 2019 fue su punto negro, cuando se fue al suelo - después gobernaría con puño de hierro el Mundial ganando 11 carreras, cinco de ellas consecutivas (San Marino, Aragón, Tailandia, Japón y Australia)- y en la pasada temporada, que de hecho ni siquiera se disputó, pero también es verdad que el índice de éxito del catalán en el trazado norteamericano es asombroso.

Ya lo decía Fonsi Nieto, el cual esperaba ver a Márquez luchando por la victoria en Las Américas, y lo cierto es que los dos líderes del Mundial, Fabio Quartararo y Francesco Pecco Bagnaia, sí sopesan a día de hoy el intangible de que el de Honda entre de lleno en su disputa por la victoria en suelo americano. Saben que Márquez no es el de antaño, pero Aragón y Misano han dado muestras más que de sobra de que la progresión del ocho veces campeón del mundo es ascendente, quizá lo suficiente como para alzar la voz en su circuito favorito.

Tengan en cuenta que Márquez ha ganado allí de forma consecutiva desde el Campeonato del Mundo de 2013 hasta 2018; es decir seis grandes premios consecutivos de Las Américas de los últimos nueve han tenido el mismo vencedor: Marc. Sobre ello, quien más teme el acercamiento en carrera del 93 a la lucha por el triunfo es Pecco Bagnaia, que necesita ganar y arriesgar, siendo el obstáculo de Márquez una piedra dura y recurrente si la Honda tiene ritmo en Estados Unidos. A Quartararo, por el contrario, le bastará el triunfo del español y un podio propio, sin sobresaltos, para dar por buena la cita, en cuyo caso acariciaría el título en Austin.