Guerra total entre Viñales y Yamaha: Quartararo fue otro culpable

La mala relación entre Maverick Viñales y Yamaha era notable desde hace tiempo en el paddock de MotoGP, aunque no se esperaba que la relación entre ambas partes se rompiese antes de tiempo. Tras el Gran Premio de Alemania decidieron separar sus caminos, con el piloto español centrado desde entonces en su nueva etapa en Aprillia. Los buenos resultados cosechados durante las últimas semanas por su futuro compañero de Aleix Espargaró sumado a los test que ha realizado ya Viñales con su nueva escudería le hacen ser sumamente optimista para 2022, mientras sigue existiendo una guerra abierta entre Maverick y Yamaha que continúa dando mucho que hablar. El último en sumarse a la polémica ha sido recientemente Lin Jarvis, máximo responsable de Yamaha Motor Racing; que ha repasado dicha polémica desde el lado de la marca nipona y lo que ha supuesto para ellos la salida de forma repentina del español.

Lin Jarvis ha dejado varios titulares en su reciente entrevista para Speedweek, reafirmando que han sido unos meses de auténtica locura dentro del box del equipo Yamaha oficial respecto al caso Maverick. En cuanto a la relación de la fábrica y los ingenieros con el piloto español, el máximo mandatario de la marca nipona ha defendido que siempre ha sido muy buena, dado que confiaban en conseguir muchos éxitos con su piloto de cara al futuro. Las duras palabras de Jarvis han avivado la guerra, resaltando las constantes declaraciones de Maverick, catalogándolas como desafortunadas, en las que ha criticado el trabajo de Yamaha desde hace mucho tiempo, a lo que además se sumó a la llegada de Fabio Quartararo, dado que el francés pasó a ser la principal apuesta de la fábrica nipona al conseguir mejores resultados sobre el asfalto.

El propio jefe de Yamaha ha defendido que la gran ascensión del francés solamente aceleró que la relación entre la marca y Viñales se rompiese, dado que desde las altas esferas de la empresa llevaban varios meses señalando al piloto español. Lin Jarvis ha sido tajante respecto a la actitud de Maverick esta temporada hasta el punto de dejar entrever que su salida ha sido lo mejor para su equipo: “Obviamente uno quiere pilotos que sean listos y eviten hacer declaraciones negativas, porque un piloto no será más rápido ni tampoco mejorará el rendimiento de su equipo si simplemente críticas a tu equipo, a tu empleador y a sus ingenieros” sentenciaba Jarvis.

Este nuevo episodio en la guerra entre Yamaha y Maverick Viñales llega a apenas unos días de que el piloto español regrese al campeonato para hacer su debut con Aprillia en MotorLand, por lo que puede considerarse una nueva medida de presión desde la marca nipona. Viñales estará bajo lupa en el GP de Aragón, siendo la primera toma de contacto real de carrera con su nuevo equipo, con el que buscará ir ganando confianza en esta recta final de temporada con vistas a poder luchar por el título en 2022.