Gresini va más allá por Marc Márquez contra Ducati y Pedro Acosta falta al respeto a Valentino Rossi
El 93 y el de GasGas, siempre ante los focos
Tercer (114) y sexto clasificado (83) y sin embargo tanto Marc Márquez como Pedro Acosta, respectivamente, están en el foco del día a día del paddock por lo que hacen y cómo lo hacen. También por su futuro, donde uno lucha por el Campeonato del Mundo de Moto GP tras años en el dique seco, lo cual sería legendario, y el otro por ir “carrera a carrera” para estar en la aspiración de acabar entre los tres primeros en su temporada debut, también con una moto satélite.
De futuro que se atisba, su marca saca los dientes
Ya hemos venido contando como en Borgo Panigale casi tienen configurada la situación de Jorge Martín y Marc Márquez con respecto a la próxima temporada, es decir, con el madrileño en equipo de fábrica y el ilerdense con una GP25, pero esto es más sencillo de planificar que de llevar a efecto; para empezar, por sus condicionantes económicos y de patrocinadores. No obstante, en Gresini ya ponen ‘peros’ a esa moto con actualizaciones de fábrica.
Más allá de lo que pueda pensarse, Prima Pramac no tiene su situación actual asegurada en el equipo italiano para la campaña que viene, de ahí que suene como satélite de Yamaha, y es ahí donde Nadia Padovani, propietaria del equipo Gresini, ha sacado los dientes en Ducati. En el medio MOW, Padovani advertía a Ducati que ““Para mantener a Marc estoy dispuesta a todo”. Y no solo eso, hacía un acto de fe asegurando que “está claro que todos estamos aquí para conseguir el mayor resultado posible, sería bonito ganar un mundial así”. Sobre el presente y el futuro, en Gresini saben lo que quieren y con quién lo quieren.
El respeto no se gana
Pedro Acosta ha querido dejar las cosas claras desde el principio en la categoría reina, aunque eso pase por aplastar a sus compañeros de equipo y toda clase de rivales en pista; pero, según sus códigos, es como debe ser, tanto si su rival es Marc Márquez como si lo fuera Valentino Rossi. En una entrevista concedida a La Vanguardia comentaba que en Moto GP “nunca te llegas a ganar el respeto. Ya sucedió con grandes nombres, que nunca se llegaron a respetar, como Valentino Rossi y Lorenzo, o Valentino y Biaggi”, y con él sucede lo mismo, porque “no me gusta hacer amigos aquí. Vengo a pasármelo bien y a ganar”, recalcaba el de Mazarrón.