El veto deportivo a Rusia llega al mundo del motociclismo

Ya es oficial, la Federación Internacional de Motociclismo (FIM) ha tomado una decisión tras la invasión rusa en Ucrania: los pilotos de motos rusos y bielorrusos no podrán disputar ninguna de las competiciones internacionales. 

Según ha esclarecido la FIM en un comunicado, la sanción conlleva la retirada de la licencia, por lo que los pilotos con origen ruso y bielorruso no estarán legalmente posibilitados para competir a nivel profesional. Además, se han cancelado todos las competiciones de motociclismo que estaban programadas en ambos países.

De este modo, la FIM atiende a las recomendaciones realizadas por el Comité Olímpico Internacional el pasado lunes en las que, como medida de presión, se animaba a las federaciones internacionales a que no permitieran la participación de deportistas y técnicos rusos y bielorrusos en las competiciones internacionales.

"Nos solidarizamos con todos los que sufren, como resultado de la invasión rusa en Ucrania, y permanecemos en estrecho contacto con nuestro miembro afiliado en Ucrania. Me gustaría agradecer a los miembros de la Junta Directiva de la FIM por decidir estas medidas en interés del deporte y la paz. La FIM, junto con sus promotores y organizadores, ya se pronunció sobre este asunto y canceló las competiciones FIM programadas en Rusia, Bielorrusia y Ucrania", ha señalado el presidente de la FIM, Jorge Viegas.

El máximo representante de la Federación Internacional de Motociclismo ha destacado que "las decisiones anunciadas están en línea con las recomendaciones y declaraciones hechas por el Comité Olímpico Internacional (COI), adaptadas a nuestro deporte. La familia FIM está observando los acontecimientos en Ucrania con gran tristeza y esperanza de una resolución rápida y pacífica".

Perjuicio en el mundo del deporte

No se trata de una decisión aislada. Varias son las instituciones deportivas que han decidido privar a los deportista nativos de la zona de conflicto de la posibilidad de participar en las competiciones y desarrollar con normalidad su carrera deportiva. Por ejemplo, la FIFA y la UEFA han vetado a los clubs y selecciones del país ruso en cualquiera de sus competiciones hasta nuevo aviso.

Además de afectar a otros deportes, el veto ruso también se ha instaurado en el mundo del Triathlon, ámbito en el que también se ha prohibido la participación de atletas rusos y bielorrusos en los diferentes campeonatos mundiales de Ironman. Otros de los perjudicados han sido los deportistas paraolímpicos rusos y bielorrusos, quienes este jueves también recibieron la negativa por parte de los los organizadores de los Paralímpicos de Invierno.