Bagnaia se mete en medio de Márquez y Valentino Rossi, y hay otra sorpresa: 'se jugó la vida'

Francesco Pecco Bagania consumó la temporada pasada una meta que se había marcado a fuego Ducati y que ya en la campaña precedente, en la 2021, amenazó con llevarse ante un poderoso Fabio Quartararo. Por eso puede el italiano hacer ahora historia como uno de los pilotos capaces de meterse en medio de Marc Márquez y Valentino Rossi, cuyos episodios y polémicas están lejos de acabar.

Y es que se han dado a conocer los diferentes nominados a los prestigiosos Premios Laureus en su edición de 2022 donde está nominado el de Ducati en la categoría de mejores regresos del año pasado, donde tendrá que luchar junto a deportistas de la talla de Tiger Woods, el mítico golfista; Christian Eriksen, el jugador del Manchester United, o Klay Thompson, el triplista de Golden State Warriors. De ganarlo, Bagnaia se uniría al prestigioso y exclusivo club de pilotos de motociclismo que lo han ganado, formado por Márquez y Rossi.

Nueva polémica

El estreno en Amazon de ‘Marc Márquez: All in’ está dejando numerosas y sorprendentes vivencias del campeón, donde, como es lógico, algunos de los episodios más llamativos son los que narran la relación con Valentino Rossi y como esta se fue deteriorando. Al respecto, Márquez dijo que “para mí era un ídolo” junto a Dani Pedrosa pero señalando 2014 como un punto de inflexión: “después de la carrera de Misano fuimos a su rancho, estuve un día, ya picados con el tiempo a ver quién batía el récord de la pista, quién no… y a partir de ese día creo que cambió algo”.

Peligro mortal y salvador

El interés que genera Márquez viene avalado por sus éxitos, pero también por sus dificultades de las que hemos conocido un nuevo y estremecedor relato relacionado con su hermano Álex Márquez. En Mandalika, en pleno episodio de la diplopía, Álex paró los pies a Honda y a su hermano para que no corriera: “Solo una vida. Estarías cometiendo un error hoy”, comentaba sobre ese instante previo a la carrera en dicho documental el hoy piloto de Gresini, apostillando que “necesitaba a alguien que lo calmara y le dijera 'no tienes que correr'”. Quién sabe qué podía haber pasado.