Wolff traiciona a Hamilton y la tensión en Mercedes abre una brecha

Los entrenamientos libres del próximo compromiso de la F1, el cual tendrá lugar en el ilustre circuito de Imola, están volviendo a generar dudas en el seno de Red Bull y Mercedes. Mientras los contratiempos técnicos se han encargado de lastrar el éxito de Max Verstappen y ‘Checo’ Pérez en los primeros eventos de la campaña, los problemas de adaptación han impedido a Lewis Hamilton y George Russell alcanzar un ritmo gratificante para los intereses de la marca.

Todo esto no hubiera tenido tanto impacto en el paddock si ninguna escudería se estuviera mostrando tan superior como Ferrari, quien está liderando el Mundial de forma contundente gracias a la buena labor de Charles Leclerc y quien tiene todas la papeletas para agrandar esa brecha en el Gran Premio de Italia que se celebrará en próximo domingo. Tanto Hamilton como Verstappen se las prometían muy felices y el formato sprint que tendrá lugar por primera vez en 2022 jugaba, en los prolegómenos del Mundial, un punto muy a favor de ambos. 

No obstante, tras comprobar el potencial de la escudería de Maranello, queda patente que esto no solo dificultará a los pilotos de Red Bull y de Mercedes conseguir una buena clasificación para la carrera del domingo, sino que además pondrá de manifiesto la gran diferencia de velocidad existente entre Leclerc y Sainz respecto a ellos. Tal y como ha informado Crash, los puntos ahora se otorgan a los ocho primeros clasificados en el sprint, en lugar de solo a los tres primeros, lo que debería dar a los conductores más incentivos para adelantar.

Mercedes, en el ojo del huracán

Eso sí, la gran sorpresa respecto a esto mira a la escudería alemana ya que durante las últimas semanas Toto Wolff ha fijado este compromiso como el punto de inflexión de Mercedes en el Mundial, una promesa que no se cumplirá dadas las últimas informaciones del director de la escudería. Ahora, al parecer, el equipo sigue trabajando para encontrar los problemas que están privando a Hamilton asomarse a los primeros puestos de la cabeza, por lo que en Imola el W13 no presentará el capítulo de mejoras que el mandamás había prometido.

A colación de esto, se avecina otro finde agónico para los dos pilotos ingleses de Mercedes, que tendrán que lidiar de nuevo con estos problemas de velocidad.