Wolff habla sobre Hamilton y Russell y el futuro de Mercedes brilla

El director de la marca británica expone su punto de vista sobre la relación entre ambos pilotos

Mercedes es uno de los equipos que ha vivido una montaña rusa en cuanto a sensaciones esta temporada. Ya en los primeros compases de la misma los malos resultados cosechados por Lewis Hamilton dejaron entrever un año complicado para la marca, sobre todo porque George Russell, quien a priori tendría sumas dificultades para adaptarse a un monoplaza más competitivo, demostró que no está en el equipo por casualidad.

Ya en los primeros compromisos del Mundial esto provocó las primeras rencillas entre Hamilton y Russell, siendo el siete veces campeón el principal instigador de ellas por no entender que el ritmo de su W13 fuera diferente al de su compatriota. Estas rencillas, con el paso de las carreras fueron en aumento hasta mediados del mes de junio, momento en el que el rendimiento de Hamilton comenzó a ser mucho más gratificante tanto para él como para su equipo: la mejora permitió a Lewis pelear por primera vez por los puestos de cabeza, aunque no con suficiente capacidad como para ser un digno rival para Verstappen, quien tiene el título más que encarrilado.

Sin embargo, esta vez es Toto Wolff el que, ya mirando a la próxima temporada, ha querido desmentir la supuesta actitud bélica entre Hamilton y Russell, quien de momento está por encima de su compañero en la clasificación general. Así pues, en declaraciones recogidas por Express, sus palabras han dejado un tanto de concertados a los aficionados ya que, aunque ha dejado de lado ese clima de tensión que muchos presagiaban en el box, ha resumido de una manera peculiar la relación entre ellos: “El respeto del novato que reconoce que su compañero de equipo es el mejor piloto de todos los tiempos, con Michael Schumacher. Y el respeto de Lewis, que se ve a sí mismo, de alguna manera en George, en términos de talento y edad, creciendo”.

No obstante, Wolff también ha dejado espacio para calificar como una relación “rara” el comportamiento entre Hamilton y Russell, especialmente porque el heptacampeón está teniendo muchos problemas para superar a su compañero en la tabla general y, por ende, justificar por qué es el líder de Mercedes y no el súbdito.