Red Bull caldea la F1: palo a Russell y Mercedes, Hamilton implicado
El panorama se presente sumamente atractivo
La de 2022 está destinada a ser la temporada más equilibrada del presente siglo en la Fórmula 1 y son muchos los motivos que empiezan a tener los equipos para pensar en ello. Es cierto que las apuestas siguen señalando Red Bull y Mercedes como los claros favoritos para ganar el mundial, pero se vienen sucediendo declaraciones de ilustres figuras del motor en las que Ferrari, McLaren e incluso Alpine también tienen su dosis de protagonismo en este apartado.
No obstante, tanto austriacos como alemanes saben de su rivalidad sobre la pista, tal y como se presenció a lo largo de la temporada precedente y por ello son las dos escuderías que más poder mediático están teniendo en el paddock, al menos en los prolegómenos del nuevo campeonato mundial. Y, en referencia a esto, Red Bull ha realizado unas declaraciones que desde luego pone más picante a una campaña que ya de por sí se prevé sumamente competida y emocionante. Helmut Marko, CEO del equipo, ha vuelto a escena para afirmar que George Russell está muy lejos de poder ser un digno rival para Max Verstappen, a pesar de las buenas sensaciones mostradas el año pasado.
En medio del júbilo que se vive en Mercedes por la candidatura del equipo alemán en los vitoreados Premios Laureus, Red Bull se ha encargado de asestar este palo al mundial, un palo que sin duda alguna supone una razón motivacional para que el joven piloto británico de 23 años tenga más ganas que nunca de hacer balance a las altas expectativas que, en líneas generales, se han depositado sobre él.
Aumenta la responsabilidad de Hamilton
Por ende, el otro gran implicado por este ataque ha sido el heptacampeón del mundo, que cada vez está más cerca de hacer oficial su continuidad en la categoría y que, tras las contundentes palabras de Marko, sentirá una mayor cuota de responsabilidad en el equipo.
Si él no responde y Russell no logra cumplir los objetivos marcados, Mercedes se verá inmerso en un serio problema que servirá en bandeja el segundo mundial para Verstappen y, por ende, la hegemonía a Red Bull.