McLaren lo tapa: el lío con Fernando Alonso se va de madre (y ya es de escándalo)

El español se muerde la lengua

Sin piezas. Así se encontró Fernando Alonso en el GP de Austria, carrera en la que comprobó que los problemas de recursos de McLaren son alarmantes.

Alonso tuvo que correr con elementos del pasado año tras quedarse los de Woking sin un nuevo morro, ni poder agilizar la llegada de uno nuevo desde Inglaterra, lo que desató el escándalo y convirtió a McLaren en el hazmerreír con lo nunca visto en un grande de la F1.

Alonso, que podía haber salido treceavo, arrancó último y desde el ‘pit lane’ para firmar una remontada mágica que lo colocó octavo.

Un milagro que avergonzó a los capos de McLaren que ya no saben como tapar las vías de agua y el amateurismo que vive la firma.

"El octavo lugar de Fernando es un buen ejemplo de su determinación y de su actitud de nunca darse por vencido. Al comienzo de la carrera, cuando estaba sentado en su coche en el garaje, acabar en los puntos no parecía probable, pero pilotó de una forma maravillosa, cuidó de sus neumáticos y tiró de martillo cuando importaba", elogia Eric a Alonso.

"Su persecución y adelantamiento a Charles Leclerc también demuestra que hay un poco más de ritmo en el coche en un domingo con respecto al del sábado. Tras un par de Grandes Premios difíciles, vamos a nuestra carrera de casa en Silverstone con la esperanza de un fin de semana con más recompensas", termina.

McLaren va de ridículo en ridículo.