Ferrari deja a Sainz sin equipo en 2023 y la tensión salpica a Leclerc

Es indudable que el Mundial ha arrancado de una forma sustancialmente gratificante para los intereses de Ferrari ya que Charles Leclerc está liderando la clasificación con 34 puntos de ventaja respecto al segundo clasificado, George Russell. Además, su compañero Carlos Sainz también está ofreciendo buenas prestaciones sobre la pista, aunque por el momento este no ha podido nivelar el ritmo del monegasco: se sitúa en la tercera plaza con 33 puntos.

Sin embargo, es el madrileño el protagonista de la última gran novedad en el box de los de Maranello a raíz de que Ferrari se haya echado atrás en un acuerdo que ya parecía cerrado: la renovación del piloto. A principio de 2022 ambas partes se sentaron a negociar para extender el contrato de Sainz dos temporadas más, un acuerdo que no parecía admitir dudas y que contaba con la aprobación de todos los elementos implicados.

Eso sí, la firma se retrasó mas de lo esperado debido a algunos detalles que posteriormente se abordaron y ahora, cuando toda parecía encarrilado para hacerse oficial la extensión de esa vinculación hasta el año 2024, Ferrari ha decidido retractarse parcialmente. La escudería dirigida por Mattia Binotto solamente ofrece un año a Sainz y, en virtud de su rendimiento en 2023, abrir la posibilidad de alargar su compromiso.

Es por eso que la tensión, en vísperas del Gran Premio de Emilia-Romagna que se celebrará esta semana, ha supuesto un gran contratiempo para Ferrari, tal y como ha recogido Planet F1. Sainz considera que ha hecho méritos más que sobra para sellar este acuerdo dos temporadas más, independientemente de lo que ocurra en 2023, y de ahí que el malestar de madrileño suponga un motivo de preocupación para la escudería, que podría comenzar a albergar rencillas internas nada favorables para lograr los objetivos.

El propio Leclerc podría acusar de forma estrepitosa este cisma momentáneo generado en el box ya que, con Verstappen dispuesto a recuperar sus mejores sensaciones y con Lewis Hamilton a punto de hacer oficial la resurrección de su W13, el Mundial podría dar un giro de tuerca atronador con los compromisos que se celebrarán en las próximas semanas.