Fernando Alonso suelta una bomba al final del GP de España

El español de McLaren termina octavo

Fernando Alonso salvó los muebles. El español, que volvió a sufrir las miserias de un McLaren que sigue a años luz de los grandes, firmó un octavo puesto de mérito, pero que lo vuelve a colocar lejos de los podios y las victorias que prometió ante del arranque de la campaña.

Montmeló ratificó lo que era un secreto a voces: la escudería de Woking no es la cuarta fuerza del Mundial.

Carlos Sainz, séptimo, volvió a colocar el Renault por delante de le asturiano y Magnussen, con Haas, se dibuja como la mejor alternativa al grupo de poder.

Un equipo Haas que, trascendía este fin de semana en Montmeló, tiene a Fernando Alonso en su hoja de ruta para 2019.

Los americanos quieren al asturiano en su proyecto el próximo curso y las conversaciones/tanteo para una oferta están en marcha.

Fernando, que agradeció el apoyo de la afición en un fin de semana muy intenso - “El publico ayuda de manera psicológica y no física. Siempre damos las mejores prestaciones en casa y estoy contento por eso. Ojalá la gente se divierta también. Con una carrera loca tienes mucho que perder y poco que ganar pero en esta carrera suele ser beneficioso” ­- no cierra puerta a nada, y menos a nadie.

Haas es una opción, pero no la única.

Lo que Alonso sí tiene claro es que, así, no se gana el tercer Mundial. Ni se sube al podio.