Fernando Alonso agrava el caos en Ferrari: enemigo para Carlos Sainz
Alpine, el gran protagonista de todo este embrollo
El transcurso de la temporada en la Fórmula 1 está cambiando las tornas respecto a los primeros compromisos del mundial ya que pilotos como Fernando Alonso y Max Verstappen están ahora mismo en su mejor momento tanto deportivo como anímico. No obstante, Ferrari está protagonizando la cara amarga de la moneda ya que la escudería de Maranello, tras empezar la campaña con la moral por las nubes y con sus dos pilotos cosechando buenas clasificaciones, ha echado por tierra ese trabajo realizado y ahora mismo está sumergido en un caos que tardará varias semanas en solventarse.
Es más, la evolución que están manifestando otras escuderías de segunda fila, como McLaren o Alpine, está agravando aún más esos problemas que han generado tanto Carlos Sainz como Charles Leclerc en las últimas carreras. Y, precisamente por el buen nivel exhibido por Alonso en los últimos envites disputados, es por lo que la escudería francesa ha querido reafirmar públicamente su plena confianza en el asturiano, que comenzó el año sembrando un mar de dudas.
Tras dos temporadas alejado de la disciplina, Alonso comprobó de primera mano el costoso trabajo que cuesta retomar una dinámica competitiva en una categoría como la Fórmula 1. Eso sí, tanto en el GP de Azerbaiyán como en el GP de Francia, el español ha dado un golpe sobre la mesa y ha dejado muy claras sus intenciones a sus contrincantes, entre ellos los dos pilotos Ferrari: puede dar mucha más guerra de la evidenciada en las primeras carreras de la competición.
Y, gracias a estos dos eventos celebrados, Alpine ha esclarecido también las metas de la escudería de aquí en adelante, sobre todo en lo que concierne a los dos compromisos que tendrán lugar próximamente en tierras austriacas: colar a sus dos pilotos entre los ocho mejores. Además, Laurent Rossi, CEO de Alpine, ha expuesto cuál ha sido la mejora más grande que ha visto en Fernando Alonso desde el primer fin de semana en el GP Bahréin que se celebró el pasado 28 de marzo: “La consistencia. Ya era rápido antes, en cada carrera podía marcar muy buenos tiempos que la mayoría de las veces eran tan buenos como los de Esteban”.
Ahora, la misión de Alpine ha quedado a la vista de todos, una misión que, de cumplirse, podría suponer el punto álgido en Ferrari para que las rencillas en la escudería suban de tono y, si se alargan mucho en el tiempo, desencadenen la fuga de Carlos Sainz, quien parece estar cansado de estar a la sombra de su compañero, Charles Leclerc, y que se ha ganado un enemigo más -deportivamente hablando- en estas últimas carreras, Fernando Alonso: el crecimiento del asturiano es el hundimiento del madrileño.