Cisma irreparable en Mercedes: Russell lo provoca y Hamilton, hundido

La escudería dirigida por Toto Wolff vive momentos de suma tensión

El Gran Premio de Azerbaiyán se saldó con dos buenos resultados para Mercedes atendiendo a la dinámica tan dubitativa que venía mostrando el equipo cuyos pilotos, Lewis Hamilton y George Russell, cada fin de semana están aumentado la tensión en el box. Nadie duda a día de hoy de la jerarquía que tiene el heptacampeón del mundo dentro del equipo, como así ha reiterado Toto Wolff en innumerables ocasiones, pero es la joven promesa británica la que está dejando atónitos a todos los integrantes de Mercedes con sus buenas actuaciones sobre el W13, un monoplaza que no es todo lo competitivo que el mandamás austriaco esperaba en los prolegómenos del Mundial.

Nadie en la escudería podría pensar que Russell estuviera dando la cara de la forma en la que lo está haciendo, especialmente porque el año pasado dispuso de un coche mucho menos competitivo en Williams, amén del grado de presión que conlleva ser compañero del piloto con más títulos en la historia de la categoría junto a Michael Schumacher.

La diferencia entre ambos pilotos a día de hoy es de 37 puntos, pero esto resulta mucho más sorprendente si tenemos en cuenta varios factores: Russell es un recién llegado, sobre Hamilton están puestas la gran parte de las aspiraciones de la escudería este año y, además, este último tiene mucha más experiencia para sacar el mejor rendimiento a un monoplaza de semejante calibre.

Mas allá de esto, la última polémica originada en el equipo se pudo presenciar en Bakú, donde solamente cuatro integrantes del equipo alemán se acercaron a Russell para felicitarle tras bajarse de su monoplaza, algo que parece no haberle sentado muy bien a pesar de que él esta respetando ese rol secundario dentro del equipo. Hamilton no está pudiendo igualar sus tiempos y la preocupación del veterano piloto de 37 años es mayor, sobre todo porque él mismo vaticinó con la llegada de Russell que su compatriota daría mucha guerra dentro del equipo

Por si fuera poco todo esto, los problemas de espalda del heptacampeón podrían dejarle sin competir en Canadá, un contratiempo que aumentaría más la brecha entre ellos, una brecha cada vez más cerca de ser irreparable.