Alonso tiene nuevo rival que será más duro que Hamilton y Leclerc que impacta en Silverstone
El español ha dado muestras de falta de ritmo mientras McLaren se destapa
Hace semanas que el Aston Martin no acaba de estar bien. Desde que llegaron las tan esperadas actualizaciones, el monoplaza de Fernando Alonso está dejando mucho que desear en cuanto a ritmo. En este sentido, el desfallecimiento en el rendimiento del AMR23 va de la mano con el resurgir de un potencial que era latente y que, se ha convertido en una realidad, se trata de McLaren. Que ya venía avisando, pero que en Silverstone ha demostrado que está también en la batalla por los podios.
Si bien es cierto que los McLaren venían en una clara tendencia positiva a lo largo de las últimas carreras, nada hacía presagiar que ya estarían en disposición de competir de tú a tú con Mercedes, Ferrari y Aston Martin. Especialmente tras un inicio de año donde apenas fueron capaces de puntuar debido a que eran inferiores incluso a los Alpine.
Fernando Alonso sigue buscando ese ritmo que lo llevó a lograr tantos podios en los primeros compases del Mundial, y es que, desde Barcelona, parece que el Aston Martin no es el mismo. Un problema grave, teniendo en cuenta que ahora, con el resurgir de los McLaren tendrá a dos nuevos rivales tan o más duros que los que ya tenía.
Si bien es cierto que en cuanto al Mundial de pilotos y de constructores los McLaren no son un gran problema debido a sus complicados inicios, sí que serán nuevos impedimentos para que Fernando logre la tan ansiada victoria 33. Por su parte, tanto Norris como Piastri están listos para aprovechar la oportunidad y lograr sus primeras victorias en Fórmula 1.
Así pues, Fernando Alonso tendrá dos nuevos rivales habituales en la lucha por los podios. Dos competidores cuyo talento es parecido al de Hamilton, Leclerc o Russell, pues se trata de dos pilotos con potencial de ser campeones del mundo. Además hace que se plantee una cuestión importante sobre los rivales de Red Bull, y es si esa superioridad es más responsabilidad del buen trabajo de los austríacos o del escaso acierto por parte de Mercedes y Ferrari, ya que no es habitual que dos equipos lejanos a la cabeza como Aston Martin y McLaren sean capaces de llegar ahí con tanta facilidad.