Las operaciones estéticas han pasado factura a Kim Kardashian, “envejece prematuramente”

Pese a que no lo ha admitido, aseguran que Kim Kardashian volvió a pasar por el cirujano

Una de las caras más conocidas del mundo de los influencers es la de Kim Kardashian. La estadounidense ha pasado a la fama, entre muchas otras cosas, por tener, a sus 44 años un rostro absolutamente exento de arrugas o de cualquier tipo de irregularidad. Algo que según muchos expertos no solo es a razón de una genética privilegiada y los cuidados en su piel.

En este sentido, no han sido los pocos que, tras ver las últimas imágenes de Kim Kardashian han asegurado que ha vuelto a pasar por las manos de un cirujano plástico para tratar de luchar, de nuevo, contra las arrugas y el envejecimiento. Pues, como muchos han afirmado, el tratamiento que siguió con bótox ahora le estaría jugando una muy mala pasada.

Contrarrestar el envejecimiento prematuro

Como han podido saber los medios de Estados Unidos, el abuso del bótox en el rostro de Kim Kardashian ahora estaría provocando unos complicados efectos secundarios en la celebridad que, se habría visto obligada a acudir a su cirujano de confianza para someterse a un tratamiento de Ponytail Lift, el cual le habría servido para disimular ese envejecimiento extremo que ha estado sufriendo a raíz del abuso de bótox.

En este sentido, pese a que dicha operación podría haber sido hecha en 2022, todavía hay un importante riesgo de que tenga que volver a pasar por el quirófano para volver a ajustar su piel, pues, con el paso del tiempo habrá que estirar más y más la cara de una Kim Kardashian que, a sus 44 años se resiste a admitir haber pasado por ninguna cirugía, por grandes que sean las sospechas.

Problemas a largo plazo

Pese a que Kim cuenta con recursos prácticamente ilimitados hay ciertos límites que ni el dinero ni la ciencia, por ahora pueden superar. En este sentido, el paso de los años es algo prácticamente inevitable y que, pese a que con un buen cuidado de la piel y tratamiento estéticos puede combatirse, es algo que tendrá que acabar asumiendo una Kim Kardashian que ya sufre los primeros efectos del abuso de bótox.

Así pues, pese a todavía ser considerada un icono del mundo de la belleza en Estados Unidos, Kim Kardashian está comenzando a pagar el precio de sus habituales retoques estéticos.