Íñigo Onieva no pasa las pruebas de acceso y no es seleccionado tras 12 meses de preparación

Íñigo Onieva, esposo de Tamara Falcó, marquesa de Griñón, ha enfrentado un golpe significativo en su trayectoria académica. Tras un año de intenso esfuerzo y preparación con el objetivo de ingresar al reconocido Instituto de Empresa (IE) de Madrid, su solicitud fue rechazada. Este inesperado desenlace ha sorprendido al círculo de la alta sociedad madrileña, ya que el IE es considerado una de las instituciones más prestigiosas de España, donde ser aceptado simboliza excelencia y prestigio. La exclusiva, difundida por el programa “Socialité”, ha generado un considerable revuelo. Con matrículas que pueden superar los 80,000 euros en sus programas de máster, el IE destaca por valorar el mérito y las capacidades sobre el apellido o los recursos económicos, estándares que Onieva aparentemente no cumplió.

La ostentación, un error que costó caro

El escándalo comenzó cuando el programa de María Patiño reveló los pormenores de la fallida candidatura de Onieva. Según las fuentes del programa, Íñigo presentó su solicitud mediante un videocurrículum grabado durante unas exclusivas vacaciones en Bora Bora, donde se hospedaba en un lujoso resort junto a su esposa. En el video, Onieva mostró un estilo de vida opulento que, lejos de impresionar positivamente, fue visto como inapropiado por el comité de admisiones. Un estudiante del IE, bajo anonimato, expresó: “No es adecuado presentar una solicitud desde un resort de lujo, menos aún alardeando del entorno. Esto no refleja seriedad ni compromiso, cualidades esenciales para ingresar al IE”.

La actitud mostrada en el video fue interpretada como una falta de humildad y respeto hacia los principios de la institución, que prioriza la formación de líderes éticos y con los pies en la tierra. La ostentación y elitismo percibidos en la presentación de Onieva resultaron contraproducentes, pues no encajaban con los valores que definen al IE. El comité de admisiones evaluó su candidatura como discordante con el perfil que buscan, el de profesionales responsables y comprometidos, más allá de su posición social.

La barrera del inglés: un obstáculo insalvable

A esta situación se sumó otro factor crítico: el limitado dominio del inglés de Onieva. A pesar del tiempo invertido en su preparación, su nivel del idioma no cumplía los requisitos del IE. Según el estudiante consultado, “su pronunciación era deficiente y su desempeño en inglés fue claramente insuficiente, lo que selló su destino en el proceso de admisión”. Aunque Íñigo intentó defender su candidatura utilizando este idioma, su falta de preparación quedó en evidencia, eliminando cualquier posibilidad de éxito.

Este episodio no solo afecta a Onieva, sino también a Tamara Falcó, quien se ha destacado por su impecable trayectoria académica y dominio de varios idiomas. Este revés podría influir en la percepción pública de su matrimonio, poniendo a prueba su imagen como una pareja modelo dentro de la élite social.