Telma Ortiz y Letizia no se hablan, han dejado de comer los domingos en Zarzuela, tampoco va el padre
Las hermanas han dejado de comunicarse y el ambiente familiar en el Palacio de la Zarzuela se ha enfriado.
La relación entre Letizia Ortiz y su hermana Telma ha llegado a un punto crítico. Las hermanas han dejado de comunicarse, y el ambiente familiar en el Palacio de la Zarzuela se ha enfriado. Anteriormente, una de las tradiciones que marcaba los domingos de la familia real era la comida que compartían en Zarzuela, un gesto simbólico de unidad familiar. Sin embargo, ese hábito ya no se mantiene, Telma Ortiz ha dejado de acudir a las citas dominicales en el palacio, hecho que evidencia el quiebre entre las hermanas.
El distanciamiento también involucra al padre de la consorte, Jesús Ortiz, quien, según las mismas fuentes, tampoco asiste a las reuniones familiares. Esta decisión ha llamado la atención, pues anteriormente las visitas familiares solían ser comunes, y los lazos con los padres de la reina Letizia parecían ser sólidos. No obstante, la situación ha cambiado drásticamente en los últimos años, y ahora parece que las relaciones con su padre y su hermana están más rotas que nunca.
La relación entre hermanas ya se quebró cuando Letizia se convirtió en reina
De acuerdo con fuentes cercanas a la familia real, el origen de esta ruptura parece estar relacionado con desacuerdos personales y profesionales que han ido creciendo con el tiempo. En los últimos años, la Reina ha tomado una postura cada vez más autónoma en su rol, algo que no ha sido bien recibido por ciertos miembros de su entorno cercano. Las diferencias en cuanto a la forma de abordar su papel dentro de la familia real y en su vida personal habrían generado malestar, especialmente entre Telma Ortiz y otros familiares que no comparten su visión.
El distanciamiento entre las hermanas refleja una evolución compleja en la dinámica familiar de Letizia, que, si bien mantiene su relación cercana con su madre, ha perdido la cercanía con otros miembros clave de su familia, lo que plantea interrogantes sobre cómo los roles y las responsabilidades de la familia real influyen en las relaciones personales y cómo, a veces, los lazos familiares pueden verse profundamente alterados por las circunstancias.
Paloma Rocasolano es la única familiar cercana a Letizia
La única relación familiar que se mantiene fuerte y cercana es la que Letizia tiene con su madre, Paloma Rocasolano. A pesar de las tensiones dentro del núcleo familiar, la esposa de Felipe VI mantiene un vínculo estrecho con su madre, a quien ha descrito en varias ocasiones como un pilar fundamental en su vida. Rocasolano es conocida por su discreción y cercanía con su hija lo que contrasta con el distanciamiento que se ha producido con el resto de la familia.
En resumen, mientras la reina Letizia se ha alejado de otros miembros de su familia, como su hermana Telma Ortiz y su padre, su relación con Paloma Rocasolano sigue siendo su único vínculo familiar cercano y sólido. Este hecho subraya el papel fundamental que su madre juega en su vida, en un contexto en el que las dinámicas familiares parecen haberse transformado profundamente a lo largo de los años.