Miguel Urdangarin deja cuentas sin pagar en Madrid que superan los 10.000 euros

Los nietos del rey Juan Carlos son objeto constante de críticas por la vida que llevan, y es que ser miembro de la familia real tiene su peso, y aunque ellos se esfuercen por querer llevar una vida “normal”, el apellido causa su efecto mediático y su forma de vivir no raya precisamente en lo común.

Una vida de lujos no se costea sola, y la de los hijos de las infantas Cristina y Elena tiene un benefactor, su abuelo Juan Carlos. Siempre se ha hablado de que es el ex monarca quien ha cubierto sus gastos desde la infancia, desde pequeños regalos, hasta la licencia de conducir y claro, los autos también. Los estudios de elite que han cursado Froilán, Victoria Federica, Juan, Pablo, Miguel e Irene también son costeados por el emérito.

Lo que más revuelo ha causado recientemente, son las altas cuentas que los jóvenes suelen dejar en restaurantes. Parece que tienen privilegios en los restaurantes más lujosos de Madrid donde hay cuenta abierta porque el abuelo paga. Estos beneficios son disfrutados por los nietos reales junto a sus amigos, y según se rumora, a veces se les va la mano en gastos. Como es el caso de Miguel Urdangarin, quien aun sin trabajar tiene un sueldo que supera los 10 mil euros mensuales, y por supuesto, el fondo viene de Juan Carlos.

Los que más gastan no son Miguel ni sus hermanos

Así lo asegura Silvia Taulés en su libro “Los sobrinos del rey”, ninguno de los Urdangarin chicos es demasiado “gastón”. No es lo mismo con Irene y su prima Victoria Federica. Irene tiene gustos lujosos, le encanta la moda y, por supuesto, las marcas. Por las calles de Madrid se pasea con zapatillas y cartera que superan los 10 mil euros. Y Victoria Federica, con su vida de influencer no aspira menos que una vida social a la altura de su fama.

En distintos portales se ha publicado que bien aprovecha junto a sus amigos los privilegios de tener cuentas abiertas en los mejores restaurantes de la ciudad. A esto ha recibido un sinfín de críticas, sumado a su presencia en eventos de moda, fiestas y locales de lujo, pero a la nieta del emérito esto parece no importarle y muestra una actitud indiferente a lo que se dice de ella.

Todo tiene su precio

Miguel Urdangarin, sus hermanos y primos, lo tiene todo. Con privilegios que una vida normal no les daría, pero también viven sabiendo que su abuelo, el emérito rey Juan Carlos está al tanto de cada paso que dan. El ex monarca tiene, de alguna forma, el control de sus vidas. Sigue día a día cada cosa que hacen, está enterado de todo, según revela Taulés. “Sobre todo desde que se fue a vivir a Abu Dabi, donde, nos informan, recibe cada mañana un informe de cómo va la vida de los seis hijos de las infantas Cristina y Elena”, afirma la periodista. 

Aun así, los jóvenes admiran a su protector, el abuelo consentidor que no duda en complacer sus caprichos. Tal como comentó Victoria Federica en una entrevista, donde señalo que su abuelo es la persona que más admira en el mundo “su persona favorita”. La complicidad entre Juan Carlos I y sus nietos es única y conocida, su apoyo incondicional lo ha hecho merecer de un puesto privilegiado en sus vidas, que cada vez que el emérito viaja a Madrid, no dudan en aprovecha todo el tiempo posible junto a su adorado abuelo.