Marivent cuesta 30.000 euros al mes sólo en limpieza y agua

Los gastos de Marivent son ingentes

El verano en Mallorca siempre tiene un protagonista silencioso: el palacio de Marivent. Aunque no pertenece a la Casa Real, los reyes Felipe VI y Letizia lo utilizan cada año como si se tratara de su residencia privada. La norma dice que su estancia debe tener un carácter institucional, pero lo cierto es que esa condición se diluye a medida que sus vacaciones se acortan y las visitas oficiales se reducen. La realidad es que el complejo no descansa nunca. Con o sin reyes, Marivent se mantiene abierto, iluminado y atendido por más de 250 trabajadores que van desde jardineros hasta personal de limpieza, pasando por seguridad, chóferes y mantenimiento. Todo un ejército invisible que, mes tras mes, devora el presupuesto público.

Los números impresionan. Solo en agua y limpieza, el Govern balear desembolsa casi 30.000 euros al mes. Una cantidad fija, independientemente de que los monarcas lo habiten o no. Y las facturas extra no se quedan atrás: en 2023 se destinaron 16.615 euros a plantar flores de temporada, 45.000 euros a poner a punto las piscinas y más de 8.000 euros a cortar el césped. Incluso barnizar muebles antiguos costó otros 2.299 euros. Detalles que, sumados, revelan el precio de mantener la fachada del palacio.

La familia real gasta millonadas en Marivent

En verano, cuando la familia real pisa Marivent, las cifras se disparan. Agosto dejó una factura de 79.384 euros en limpieza, julio otros 55.084, y en marzo —mes de visitas institucionales— se alcanzaron los 41.136 euros. Todo ello gracias a cientos de horas extra y suplementos por trabajo nocturno. En contraste, diciembre apenas costó 3.090 euros, con un único empleado a jornada completa. El contraste es tan evidente que resulta imposible desligar el aumento del gasto de la presencia regia.

El agua, otro de los capítulos silenciosos, tampoco es barata. En un solo año, la empresa Emaya facturó al Govern 88.169 euros solo por el abastecimiento del complejo. Si se suman ambos conceptos —agua y limpieza—, el resultado es demoledor: 355.000 euros al año, lo que supone más de 29.500 euros mensuales solo para mantener Marivent en marcha.

Así pues, mientras los reyes disfrutan cada agosto del sol mallorquín en un palacio ajeno, el verdadero coste recae en los presupuestos públicos: un lujo silencioso que se paga durante todo el año, estén o no estén los monarcas en sus jardines.