Los hijos de Iñaki Urdangarin tratan con desprecio a los hijos de Ainhoa Armentia

Los esfuerzos de Iñaki Urdangarin para formar una familia han sido en vano

Los hijos de Iñaki Urdangarin tratan con desprecio a los hijos de Ainhoa Armentia Los hijos de Iñaki Urdangarin tratan con desprecio a los hijos de Ainhoa Armentia

El proceso de divorcio entre Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina fue especialmente complicado para todos los miembros del clan Urdangarin. Los que fueran Duques de Palma se enfrentaron en una larga y dura negociación en la que los que peor parados salieron de todo, acabaron siendo los cuatro hijos de la pareja. En este sentido, Juan, Pablo, Miguel e Irene sufrieron las peores consecuencias de una separación en la que Cristina e Iñaki Urdangarin lograron romper por completo la familia que habían ido formando desde su boda en el año 1997 y que se acabó de forma oficial en 2024.

Tras la separación, Iñaki Urdangarin ha sido capaz de encontrar una nueva ilusión en Ainhoa Armentia. La abogada se ha ganado el corazón y la confianza del que fuera Duque de Palma, que sueña con poder recomponer un núcleo familiar sólido con sus hijos y los de Ainhoa Armentia. Sin embargo, por muchos que hayan sido los esfuerzos de Iñaki, la unidad familiar con la que sueña está muy lejos de cuajar.

Y es que, a pesar de que no han sido pocas las actividades en las que ha tratado de juntar a sus hijos con los de Ainhoa Armentia, la realidad es que Juan, Pablo, Miguel e Irene se sienten muy por encima de sus hermanastros. Los jóvenes consideran que no tiene nada que ver con los hijos de la abogada y están poniendo muchas trabas a la hora entablar una buena relación.

Irene y Miguel, los que más se oponen a todo

Tal y como ha desvelado la experta terapeuta Lara Ferreiro en Lecturas, es muy probable que los hijos más jóvenes de Iñaki pongan trabas a la hora de aceptar a los hijos de su madrastra e incluso que puedan llegar a sentirse superiores a ellos. Además, no debe resultar nada raro el hecho de que los cuatro jóvenes Urdangarin vean a Ainhoa Armentia como una especie de “madrastra malvada” y que se nieguen a relacionarse con ella. Buen ejemplo de ello fue la última cena de Navidad, donde Irene montó un numerito enfrente de toda la familia.

Así pues, lejos de formar un nuevo núcleo familiar, Iñaki Urdangarin ha acabado rompiendo por completo toda relación entre sus hijos, Ainhoa Armentia y todo su entorno. Una ruptura que tiene muchos tintes psicológicos detrás.