Las notas de la infanta Sofía en Gales generan revuelo en Zarzuela

La hija menor de los reyes Felipe VI y Letizia enfrenta una situación difícil en su paso por el UWC Atlantic College en Gales.

La infanta Sofía, hija menor de los reyes Felipe VI y Letizia, comenzó su segundo curso de bachillerato internacional en el UWC Atlantic College de Gales (Reino Unido) el pasado mes de agosto. Sin embargo, a diferencia de su hermana Leonor, quien culminó su tiempo en el mismo colegio sin problemas aparentes, Sofía parece estar atravesando un camino lleno de dificultades académicas. Las notas obtenidas en este segundo periodo no han alcanzado las expectativas, y esto ha desatado una ola de críticas y preocupaciones dentro de la Casa Real.

El bachillerato de Sofía en Gales representa una inversión importante para sus padres, quienes financian íntegramente los 82,000 euros anuales que cuesta la estancia en el UWC Atlantic College. Sin embargo, lo que realmente ha llamado la atención no es el coste, sino las constantes comparaciones entre su desempeño académico y el de su padre. Al parecer, la joven infanta comparte con el rey Felipe VI una tendencia a la impuntualidad que podría estar afectando sus calificaciones y su rendimiento en clase. En su juventud, Felipe era famoso por alargar sus horas de sueño, algo que sus instructores militares trataron de corregir con medidas drásticas, como despertarlo con un cubo de agua. Ahora, parece que la infanta Sofía ha heredado esta dificultad, llegando en varias ocasiones tarde a clase y mostrando poco interés en sus estudios.

Un comportamiento que incomoda a Gales y preocupa a Zarzuela

Aparte de sus problemas de puntualidad, Sofía ha llamado la atención de sus profesores y compañeros por su comportamiento fuera del aula. Según testigos, la infanta se ha visto envuelta en actividades que poco encajan con la disciplina que Zarzuela esperaba de ella. Fuentes locales aseguran que, durante algunos fines de semana, Sofía y su grupo de amigos han organizado reuniones en el cercano pueblo de St. Donat’s, donde presuntamente habrían consumido alcohol.

Este comportamiento ha generado malestar entre los habitantes de la zona y preocupación entre sus padres, Letizia y Felipe Vi, quienes han abordado el tema en conversaciones serias con su hija. Al parecer, los reyes ya han advertido a la joven que este tipo de conductas deben terminar, ya que su desempeño académico podría verse gravemente afectado si continúa con estas escapadas nocturnas.

La infanta Sofía, entre la presión académica y el escrutinio público

Ahora bien, a pesar de que la hermana de la princesa Leonor ha aprobado todas sus asignaturas, lo ha hecho con notas "muy justas", lo que ha dejado una sensación de decepción entre sus profesores, quienes esperaban mucho más de la hija de los reyes de España. La joven, de apenas 17 años, parece tener dificultades para concentrarse en clase y, según se rumorea, sus notas reflejan una falta de compromiso que preocupa a sus padres.

En el Palacio de la Zarzuela, la situación ha encendido las alarmas. Para la familia real, es crucial que la infanta Sofía mantenga un buen desempeño en su formación académica, pues no solo se trata de su educación, sino también de la imagen de la monarquía española. Con la atención mediática sobre sus hombros, la joven enfrenta el reto de demostrar que puede estar a la altura de las expectativas reales, tanto dentro como fuera de las aulas.